MURCIA.- La capilla del tanatorio de Jesús no fue suficiente para
albergar a la gran multitud que se congregó ayer para dar su último
adiós a Tito Bernal. Muchos de los asistentes permanecieron fuera
durante la Misa por estar llena la iglesia.
Anteayer a media mañana fallecía Tito Bernal, un día en que el
sol brilló y en la tarde, reunidos en el tanatorio todos sus hermanos, su
viuda, su madre, familiares y amigos más
allegados, acompañaban los restos mortales del único e irrepetible Tito.
Desde una terraza del tanatorio se pudo observar una
demostración aérea de amigos aviadores de Tito, que desplegaron una corona en su
honor, hecha con humo, haciendo un dibujo que adornaba el cielo azul murciano.
Los presentes, sin saberlo, comentaron que seguro que era un homenaje al recién
fallecido como mas tarde así fue comunicado por los promotores de la
iniciativa.
En la mañana de ayer llovió durante el sepelio de Tito
Bernal. El cielo, como un amigo, familiar o colega mas, se había unido al llanto,
por la tristeza que produce cuando alguien querido se va.
Durante la Misa llamó la atención una frase del cura, párroco de Capuchinos, distrito
religioso al que por domicilio pertenecía Tito, que hizo alusión a que era
el hombre de la sonrisa y que siempre alegre ejerció su profesión.
En la capilla se
encontraban colegas fotógrafos de la prensa murciana que habían querido acompañar
a la familia en estos momentos tan difíciles, algunos entre lágrimas por la
ironía de estar trabajando para su medio retratando a Tito, su compañero en el
oficio.
Entre los asistentes se encontraban también el consejero Pedro Alberto Cruz, el político Enrique
Ujaldón, excompañeros de La Verdad, amigos de radio y televisión, compañeros de Canal 8
televisión, cadena con la que colaboraba en el programa Cerca de Ti, la miss
María José Besora, gran amiga de Tito, becarios de cuando estaba en La Verdad en fotografía y el legendario pintor murciano José María Falgas, que también quiso despedirse de su gran amigo.
Al finalizar la Misa, sus restos mortales fueron llevados
al Cementerio de Nuestro Padre Jesús, donde recibieron sepultura, cubiertos de flores, según crónica y fotos del digital femenino murciano, www.guapamurcia.es
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