Otra vez Murcia en la prensa nacional y, como siempre, por cosa mala. 
Esta vez la responsabilidad es compartida: PSOE, Podemos, Ganar (IU para
 entendernos) y UPyD han firmado un pacto preelectoral en el que 
implícitamente exigen que dimita Bascuñana, ese humilde delegado del 
Gobierno, ajeno a pompas y lisonjas, cuya austeridad personal llega al 
extremo de no poder utilizar siquiera los cajeros automáticos, y cuya 
abnegada labor ya viene siendo boicoteada, pues no se le cuadran los 
guardias civiles socialistas. 
Y no sólo eso, coinciden en querer cambiar
 la ley electoral para que el voto a todos los partidos, mayoritarios o 
minoritarios, cuente lo mismo, en un indisimulado intento de que el PP 
pierda la mayoría y acabemos en el caos del reparto de sillones. 
Aspiran, además, a abrir espacios para la participación ciudadana, lo 
cual carece de sentido cuando ya hay políticos que cobran por hacer su 
trabajo. El punto central del pacto es que pretenden que desaparezcan 
los imputados de las listas y de los cargos públicos, lo cual constituye
 un ataque sin precedentes al PP, además de que no se han enterado de 
que ya no hay imputados, pues se les ha cambiado la denominación por la 
de investigados. 
Esta escenificación frentepopulista nos retrotrae a los tiempos de la
 Guerra Civil, y lo peor es lo que está oculto, lo que no dicen. 
Probablemente el pacto contiene cláusulas secretas para tratar de 
apropiarse del Gobierno, que ya, por uso consolidado, pertenece al PP y 
que éste, en su infinita generosidad, estaría incluso dispuesto a 
compartir con los buenazos de Ciudadanos. Es, en definitiva, un pacto 
contranatura a la extremeña (perdón, corrector, borre ‘a la extremeña’) 
que traería a la Región corrupción, deuda, déficit, recortes, paro, 
aeropuertos sin abrir, Aves sin soterrar, despilfarros en la política 
cultural y, por supuesto, ya podríamos despedirnos de la Paramount. Un 
auténtico escándalo que sólo podrá ser paliado con el voto al partido 
del marido de la Cospedal, Rato, Trillo y Martínez Pujalte.

No hay comentarios:
Publicar un comentario