MURCIA.- Ecologistas en Acción se ha dirigido en sendos
escritos a la Alcaldía y a la Concejalía de Urbanismo, Medio Ambiente y
Huerta de Murcia para denunciar el "aumento imparable y la proliferación
caótica" de terrazas que "suponen la ocupación de suelo urbano público
para beneficio privado, e incluso hacen difícil el tránsito de peatones
en algunas aceras y plazas del municipio".
Por ello, ha reclamado
medidas efectivas que "hagan compatibles el número y perímetro de las
mismas con la función pública del suelo urbano para uso y disfrute de
todas las personas".
La organización ecologista, en su denuncia
ante la Administración local, señala que la situación de ocupación de
zonas peatonales públicas "se está volviendo insostenible e inmanejable
en diversas zonas como la Plaza de las Flores, Cetina o la Plaza de
Santo Domingo, por citar solamente tres ejemplos".
En este
sentido, advierten que esta situación "ha de tenerse en cuenta a la hora
de abordar nuevos proyectos en el municipio".
Por ejemplo, en la zona
de Alfonso X el Sabio, el número y tamaño de las terrazas "puede verse
incrementado tras su peatonalización parcial, si no hay un control
estricto y restrictivo de la ocupación de suelo peatonal por las
terrazas de los establecimientos hosteleros y lugares de ocio nocturno".
La
organización ecologista considera que "hay que evitar este tipo de
efectos negativos y no deseados en los procesos de peatonalización o
semipeatonalización".
Así, "el aumento de número y extensión de
las terrazas y sus infraestructuras complementarias, con una ocupación
desmesurada y descontrolada del espacio público para uso y lucro
privado, genera diferentes problemas medioambientales y vecinales, como
contaminación acústica, mayor volumen de residuos, vertidos y basuras en
general, aumento de la contaminación atmosférica y odorífera local,
conflictos entre la población residente y los consumidores/usuarios de
las terrazas, especialmente en horario nocturno, efecto barrera para
peatones y efecto barrera visual para los monumentos y edificios
singulares del paisaje urbano".
Para terminar, la organización
ecologista recuerda que Murcia "es una ciudad ruidosa, en la que miles
de personas soportan niveles de ruido urbano superiores a lo recomendado
por la Organización Mundial de la Salud. Las principales fuentes de
ruido urbano en Murcia son las actividades de ocio, especialmente la
hostelería, y el tráfico rodado".
Por ello, consideran necesario
"una unidad de control acústico específica y un aumento de los recursos
humanos, técnicos y personal formado en la prevención de la
contaminación acústica".
También hay que "aumentar el control
sobre el ruido nocturno producido los servicios municipales, como las
máquinas de limpieza viaria o la recogida de basuras y una intervención
más significativa en zonas acústicamente saturadas, especialmente en el
casco urbano de Murcia, con medidas preventivas y precautorias sobre el
ruido producido por las actividades de ocio y el tráfico rodado en las
principales arterias de la ciudad, así como potenciar el desarrollo de
zonas tranquilas, con un bajo nivel sonoro".
Para ello, "es
imprescindible la coordinación de estas medidas con un verdadero Plan de
Movilidad Sostenible que reduzca y pacifique el tráfico rodado en el
casco urbano, aumentando el transporte público y medios alternativos,
estableciendo una verdadera red de carriles bici para la movilidad
dentro del casco urbano y su conexión con pedanías".