CARTAGENA.- El Campo de Cartagena se encuentra en estado de emergencia por la falta
de agua tras sufrir tres años de una "brutal" sequía. Por ello, los
alcaldes de Pilar de la Horadada, San Pedro del Pinatar, San Javier, Los
Alcázares, Torre Pacheco, Fuente Álamo, Cartagena y Murcia han decidido
hacer un frente común con los regantes para obtener soluciones.
Y es que, explican desde la Comunidad de Regantes del Campo
de Cartagena (CRCC), "la situación se ha agravado considerablemente" por
el cierre del Trasvase Tajo-Segura en mayo, por el sellado de las
desalobradoras particulares y desmantelamiento del salmueroducto que
limita el uso de las aguas subterráneas con alta salinidad; la situación
de los embalses de la Cuenca del Segura, que se encuentran al 13 por
ciento de su capacidad, y porque ya no se dispone del agua de la
desalinizadora de Torrevieja, por destinarse toda su producción al
abastecimiento de la población.
Este cúmulo de problemas
están provocando una reducción importante de la actividad agrícola que, a
su vez, redunda en una disminución de empleo. En esta línea, los
regantes destacan que la contribución total al PIB de la agricultura del
Campo de Cartagena y de su industria agroalimentaria asociada es de
1.015 millones de euros, generando un empleo directo de 41.500 personas.
Además están en peligro grandes superficies de arbolado (más de 10.000
has) y de invernaderos (unas 2.000 has).
Debido a esta
"grave" situación, la Junta de Gobierno de la Comunidad de Regantes del
Campo de Cartagena (CRCC) ha mantenido una reunión de trabajo con los
alcaldes de los municipios de sus zonas regables.
Concretamente,
la alcaldesa de Cartagena, Ana Belén Castejón; el de Fuente Álamo,
Antonio Jesús García; el alcalde de Los Alcázares, Anastasio Bastida, y
el del Pilar de la Horadada, Ignacio Ramos García. Así como el alcalde
de San Javier, José Miguel Luengo; la alcaldesa de San Pedro del
Pinatar, Visitación Martínez; el alcalde de Torre Pacheco, Antonio León,
y Antonio Navarro, teniente alcalde de Murcia. A la misma ha asistido
el presidente del Sindicato Central de Regantes Acueducto Tajo-Segura
(Scrats), Lucas Jiménez.
Durante la misma, el presidente
de la CRCC, Manuel Martínez,indicó que, a día de hoy, su entidad solo
prevé disponer para el presente año hidrológico el 7% de los recursos
necesarios para cubrir la demanda hídrica de los cultivos de sus zonas
regables.
Además
ha explicado que en junio del presente año, la Administración Estatal
modificó el modo de aplicación de las tarifas del trasvase que se ha
realizado durante 38 años. Esta modificación le supondría a la CRCC
tener que pagar unos 4 millones de euros anuales sin recibir agua
procedente del trasvase. Lo que considera "un verdadero despropósito; no
estamos dispuestos a pagar por un agua que no se nos suministra".
Ha
señalado que lo principal es el mantenimiento del Trasvase Tajo-Segura,
"dotándolo de mayor estabilidad, el resto son medidas complementarias".
También ha destacado que existen una serie de medidas, que se llevan
años proponiendo al Estado, que pueden resolver toda esta problemática
hídrica, como es la construcción de una red de colectores, una planta de
tratamiento, y un emisario, para la conducción y evacuación del rechazo
de las desalobradoras.
A lo que se suma aumentar el
aporte de agua desalinizada, finalizando "urgentemente" la acometida
eléctrica de la desalinizadora de Torrevieja e incrementar su capacidad a
120 hm3, además de ampliar en 25 hm3 más la capacidad de producción de
la desalinizadora de Escombreras, y analizar la construcción de nuevas
desalinizadoras.
Otras medidas pasan por agilizar la
construcción de las infraestructuras para la consecución del vertido
cero al Mar Menor (ampliación de la red de captación de agua de drenaje,
y ampliación de la desalobradora del Mojón para la reutilización de
este agua de drenaje para riego) y la puesta en marcha de unos 250
sondeos particulares durante el periodo de sequía, explican desde la
Comunidad de Regantes en comunicado de prensa.
También
favorecer las cesiones de derechos (bancos del agua), el precio social
del agua desalada y la realización del Plan Hidrológico Nacional "para
que se puedan ejecutar las infraestructuras hidráulicas necesarias que
den estabilidad al sistema de una vez por todas".
Poniendo
de manifiesto que "la problemática hídrica de nuestro país no se debe
solamente a la falta de precipitaciones, sino al déficit de
infraestructuras, existiendo soluciones viables socioeconómicamente y
sostenibles medioambientalmente a corto, medio y largo plazo", tal como
refleja el estudio elaborado por el Scrats, y en el que ha colaborado la
CRCC.
Por otro lado, Manuel Martínez ha solicitado el
apoyo público e institucional de cada uno de los ayuntamientos para
"garantizar la perdurabilidad" del Acueducto Tajo-Segura "como pilar
básico de futuro para nuestras poblaciones"; conseguir que "se lleven a
cabo a la mayor brevedad posible, todas aquellas medidas que pueden
aportar agua a nuestra Comarca, y solucionar de manera definitiva la
problemática hídrica que venimos sufriendo".
Asimismo,
les ha pedido que suscriban el 'Manifiesto Levantino' por el agua y le
den la máxima difusión para conseguir los objetivos del mismo; rechazar
el cambio en el modo de aplicación de la tarifa del trasvase Tajo
Segura; agilizar los trámites administrativos que puedan requerirse de
los ayuntamientos para la ejecución de medidas; hacer frente común con
los regantes, participando de forma activa en cualquier foro o debate
que se celebre en defensa del sector, sobre todo ante sus partidos
políticos y ante la Administración del Estado.
Tras la
intervención del presidente de la CRCC, según informan desde la
Comunidad de Regantes, los alcaldes han expuesto su opinión sobre la
crítica situación que está sufriendo el Campo de Cartagena, manifestando
su apoyo "firme y decidido" al sector agrícola, demandando la puesta en
marcha lo antes posible de todas las actuaciones que posibiliten la
disponibilidad de agua de modo estable al Campo de Cartagena.