MURCIA.- La Consejería de Sanidad, a través de la Dirección General de
Salud Pública y Adicciones, recuerda a la población la "importancia" de
adoptar medidas preventivas para evitar enfermedades de transmisión
alimentaria por el consumo de alimentos o agua en mal estado. De hecho,
desde principios de año, y hasta la fecha, los casos de intoxicación por
alimentos son 204 frente a los 212 del año 2014.
El director
general de Salud Pública y Adicciones, Manuel Molina Boix, ha explicado que
este tipo de afecciones tienen un "marcado carácter estacional" siendo,
precisamente, la época estival la que mayor riesgo entraña por lo que
"es necesario adoptar determinas precauciones en el transporte,
almacenamiento y preparación de los alimentos".
En este sentido,
desde el Servicio de Seguridad Alimentaria y Zoonosis se aportan una
serie de consejos orientados a prevenir este tipo de situaciones. Así,
se recomienda comprar en establecimientos sujetos a control sanitario,
comprobar que los productos proceden de industrias alimentarias
autorizadas, y leer atentamente el etiquetado.
Asimismo, se debe
velar por mantener unas óptimas condiciones higiénico-sanitarias de los
locales, como el lavado de manos del personal manipulador, vigilancia de
la limpieza de utensilios como cuchillos o máquinas de cortar, por
ejemplo, en los comercios minoristas, y por una correcta refrigeración
de los alimentos expuestos.
En el ámbito doméstico hay que tener
cuidado con los alimentos perecederos, intentando distribuirlos en el
frigorífico de forma ordenada no mezclando los ya cocinados con los
crudos, además de procurar envasar los alimentos antes de refrigerarlos
para que no se den contaminaciones cruzadas. Asimismo, de debe cocinar
con la menor antelación posible al consumo, descongelar los productos en
el frigorífico o microondas y lavar bien las verduras.
Molina ha
puntualizado que "es fundamental tener todos estos aspectos en cuenta ya
que, generalmente, en los brotes de enfermedades de transmisión
alimentaria suelen concurrir varios de estos factores debido a que a
veces olvidamos alguna de estas medidas de precaución".
En muchas
ocasiones, según ha subrayado el director general, "está en nuestra mano
evitar este tipo de episodios desagradables". En este sentido, ha
recordado que "una temperatura adecuada para cocinar y refrigerar los
alimentos podría evitar casi la mitad de las intoxicaciones durante los
meses de verano".
Las
enfermedades de transmisión alimentaria o intoxicaciones son
consecuencia de alimentos tóxicos en sí mismos, como las setas
venenosas, por ejemplo, o de alimentos que actúan como meros vehículos
de las sustancias nocivas o microorganismos patógenos, como es el caso
de huevos o carnes contaminadas con salmonella.
Desde el año 2007,
según los datos del Servicio de Epidemiología de la Dirección General
de Salud Pública y Adicciones, el número de brotes notificados en la
Comunidad Autónoma se ha estabilizado y oscila entre los 25 y 22
anuales.
Entre los factores responsables de estos brotes destacan
las alteraciones de temperatura, el consumo de alimentos crudos o poco
cocinados, su inadecuada manipulación y factores ambientales
relacionados con las condiciones higiénico-sanitarias.
En
la Región, en el año 2007 se registraron 22 brotes por intoxicaciones
alimentarias, una cifra que en 2013 ascendió a 24 de los que el 50 por
ciento fueron en el ámbito general, el 33,3 por ciento en el familiar, y
el 16,7 por ciento de ámbito desconocido.
El número total de
intoxicaciones en 2013 fue de 209, de las que más del 65 por ciento,
136, estaban enmarcadas en alguno de estos 24 brotes. En 2014, la
tendencia fue similar, experimentando un leve descenso en el número de
brotes, que se situó en 22. De ellos, más del 68 por ciento fueron en el
ámbito general, más del 18 por ciento en el familiar, y el 13 por
ciento de ámbito desconocido.
Los casos notificados de
toxi-infección alimentaria durante el pasado año se elevaron a 212 y más
del 97 por ciento, 206, estuvieron vinculados con los 22 brotes
detectados a lo largo de dicho periodo.
En lo que va de año, y
según primeros datos provisionales, se han dado 15 brotes de los que el
73,3 por ciento son de ámbito general, el 20 por ciento pertenecen al
ámbito familiar y más de un seis por ciento es de origen desconocido.
Desde
principios de año, y hasta la fecha, los casos de intoxicación por
alimentos son 204 de los que más del 97 por ciento, 198, se relacionan
con alguno de los 15 brotes notificados.
Para concluir, el
director general de Salud Pública y Adicciones, Molina Boix, apeló a la
responsabilidad ciudadana para prevenir este tipo de situaciones en las
que tiene una "relevancia trascendental" la forma de conservar,
almacenar o manipular los alimentos.