1. El Aeropuerto de Corvera (denominado
oficialmente y con cierta sorna Aeropuerto Internacional de la Región de
Murcia) nunca debió construirse, no solamente porque ha resultado una
ruina para la ciudadanía, sino porque era absolutamente innecesario dada
la proximidad del Aeropuerto de San Javier y del Aeropuerto de
Alicante, ambos integrados en la red estatal de AENA. El Aeropuerto de
Corvera fue un capricho muy caro de los gobernantes del PP.
2. El
Aeropuerto de San Javier ha demostrado ser un aeropuerto en continuo
crecimiento y exitoso, no habiendo ninguna razón económica que
justifique su cierre. Además el hecho de estar integrado en la red
estatal de AENA garantiza que sus hipotéticas pérdidas en un momento
determinado queden compensadas con las ganancias de otros.
3. El modelo aeroportuario español es un
modelo centralizado, en el que una empresa mixta con mayoría de capital
público (51%), AENA, estructura la gestión aeroportuaria de un red de
aeropuertos en los que su know how, su experiencia de gestión y su
solvencia financiera combina la rentabilidad con la seguridad y la
pervivencia de una red que presta servicios en todo el territorio.
En
este sentido, AENA es la garante del sistema público de transporte
aéreo. El sistema puede ser mejorable, pero en última instancia es el
control público de la empresa, ejercido a través de ministerio de
Fomento el que sirve de tutela y conciliación de los intereses generales
y los puramente mercantiles de optimización del beneficio y
rentabilidad.
Por tanto, un aeropuerto en la Región de Murcia,
integrado en la red pública de AENA viene a garantizar la inclusión de
nuestra Región en un sistema de transporte público que otorga seguridad,
calidad y rentabilidad. Dicho así, podría pensarse que estamos ante una
quimera, pero el Aeropuerto de San Javier ha venido a demostrar en los
últimos años que resulta posible aunar estos tres vectores con éxito. Ha
sido reconocido como el mejor aeropuerto de los de su categoría en dos
ocasiones y con más de un millón de pasajeros al año y beneficios en su
cuenta de resultados, constituye una de las joyas de la corona de AENA.
4.
El problema estriba en la incompatibilidad de dos aeropuertos tan
próximos (entre Corvera y San Javier hay apenas 40 km.). El Gobierno
regional e incluso AENA ha reconocido que abrir el Aeropuerto de Corvera
supondría el cierre de San Javier. Por ello, Podemos Región de Murcia
siempre ha defendido que, independientemente de su ubicación (San Javier
o Corvera), nuestra opción es un aeropuerto público en la Región de
Murcia y, por tanto, integrado en la Red de AENA y regulado por los
Presupuestos Generales del Estado. Consideramos que esta es la única
garantía real de que la ciudadanía no seguirá siendo esquilmada con más
aventuras aeroportuarias y de que los trabajadores del aeropuerto de San
Javier sean recolocados sin problemas.
5. Podemos Región de
Murcia defendió un acuerdo multilateral entre el ministerio de Fomento
(AENA), el ministerio de Defensa y la Comunidad Autónoma de la Región de
Murcia para que el Aeropuerto de Corvera fuera adjudicado a AENA,
incluido en la red pública de transporte e incorporase un traslado
ordenado de San Javier con plena garantía de los derechos de los
trabajadores, del área comercial y de las compañías aéreas con slots
vigentes en el aeropuerto marmenorense.
Pero de nuevo el
empecinamiento de la nueva hornada de líderes populares, con Pedro
Antonio Sánchez a la cabeza, y la defensa a ultranza del modelo privado
discrecional (privado para los amigos) dirigió los destinos de Corvera
hacia el concurso y con ello a la gestión privada, a la exclusión de
aeropuerto regional de la red pública de transporte aérea y a buscar una
competencia incomprensible con el único y rentable aeropuerto público
de la Región.
6. El Gobierno regional apostó por la vía del
concurso para adjudicar el aeropuerto de Corvera, una concesionaria que
ha resultado ser finamente AENA. ¿Significa esto que el aeropuerto de
Corvera estará dentro de la Red Estatal de Aena y regulado por los
Presupuestos Generales del Estado? No, pues la concesión se la ha
llevado una filial de AENA que gestionará el aeropuerto como un negocio
privado.
El resultado es el que todos conocemos, AENA se ha adjudicado
el concurso ante la incomparecencia de otros postores (que asomaron
únicamente al albur del interés depredatorio), pero lo ha hecho bajo la
fórmula de aeropuerto privado y a fin de asegurar un ordenado
desmantelamiento de su negocio en San Javier, a fin de poder derivarlo a
otros destinos y sin tener la obligación de incluir Corvera en la red
pública estatal.
7. En estas condiciones, el cierre del
Aeropuerto de San Javier plantea un serio riesgo de que en la Región de
Murcia terminemos sin disponer de un aeropuerto público. Además de que
esto no ofrece suficientes garantías para el mantenimiento de los
derechos de los trabajadores. Este caso puede terminar siendo el primer
experimento de privatización aeroportuaria del PP. Los murcianos
volveremos a ser conejillos de indias de un nuevo experimento en
política de infraestructuras. AENA se sacude el servicio público en la
Región de Murcia y lo pone en bandeja para vender el nuevo negocio a un
tercero en el medio plazo.
8. Podemos sigue insistiendo en la
devolución de los más de 200 millones de dinero público del aval
concedido a Aeromur para abrir el Aeropuerto de Corvera y que sigue
costando a los murcianos más de 15.000 euros diarios. Recordemos que el
empecinamiento en erigir el así denominado Aeropuerto Internacional en
la Región de Murcia, a mayor gloria de los fastos inmobiliarios que
acabaron protagonizando la crisis, condujo al gobierno regional a
proyectar y ejecutar un aeropuerto, Corvera, que nació ruinoso y cuyo
plan de negocio resultó tan inconsistente que la entidad concesionaria,
Aeromur, se desmarcó del mismo provocando la ejecución del aval prestado
por la administración regional con un coste para las arcas públicas de
182 millones de euros, coste que se ha ido incrementando año a año.
Pese
a las maniobras maquilladoras que siguen vendiendo la ventura de este
aeropuerto, debemos parar unos momentos y analizar el pecado original de
Corvera, que no es otro que el haber sido concebido como un aeropuerto
privado, situado fuera de la red pública estatal.
Solo así se
conciben las prácticas predatorias que sobre el mismo han practicado
parte del empresariado murciano, la propia administración popular e
incluso las empresas gestoras low cost que se han asomado a los
concursos públicos a fin de tantear pelotazos al estilo aeropuerto de
Castellón.
(*) Sociólogo, profesor de la UMU y diputado regional de Podemos