La pregunta
trampa que ha servido a los sociólogos para detectar cual es la cuestión
por la que los electores tradicionales de derechas se muestran ahora
esquivos con el Partito Popular, hasta el punto de que podría pasar a
ser la cuarta fuerza política en unas futuras elecciones generales, es
su incumplimiento del programa electoral en materia de impuestos.
Como
el Partido Popular es el que más votos recibió en las elecciones
generales del 2011, 10.830.693, el 44,62 % de todos los votos
escrutados, el rechazo a sus incumplimientos va a determinar el
futuro panorama político español que se presenta muy complejo.
Los
considerados sociólogos de campo españoles más expertos, los
cinco grandes que vienen realizando sondeos desde el inicio de la
actual democracia española, coinciden en afirmar que nos
encontramos en una situación constituyente. Los sondeos
muestran que vamos a pasar a una nueva configuración política
desde el bipartidismo entre la derecha actual del PP y la
izquierda del PSOE, a un grupo más amplio de cuatro fuerzas
dominantes entre las que destacan los emergentes Ciudadanos y
Podemos.
Los sondeos de los dos últimos meses muestran una
tendencia alcista de Ciudadanos que complementa la tendencia
bajista de Podemos, pese a que todavía se situaría como la fuerza más
respaldada por la ciudadanía española.
De ser ambas fuerzas
las más votadas situaría en una difícil situación a los dos
partidos tradicionales, pues por la configuración electoral,
quedar como el tercer o cuarto partido en el ámbito nacional podría
suponer un descalabro en el número de diputados.
Las
elecciones autonómicas del próximo domingo de Andalucía deben
servir para mostrar por donde podrá ir a partir de finales de año el
futuro político español. Las elecciones autonómicas y locales
han sido un anticipo de los resultados de las generales. En este
caso, las andaluzas son un anticipo del anticipo que puede
empezar a marcar el cambio del actual panorama político.
En
conclusión, los resultados del próximo domingo van a empezar a
mostrar el camino futuro de la política española. Mientras llegan
la 22 horas del día 22, cuando se conocerá el anticipo de los
resultados, esta semana también habrá que estar pendiente de lo
que digan los hombres de negro de la ‘Troika’ que han llegado el
miércoles pasado a Madrid.
Los inspectores de la Comisión
Europea y del Banco Central Europeo están evaluando cómo ha
evolucionado la banca y la situación económica española. Se
trata de la tercera visita de vigilancia tras haber recibido
41.300 millones de euros de los 100.000 de que disponía España de la
Unión Europea para sanear el sector financiero y del que ya se han
devuelto de forma anticipada 2.800 millones. La misión que
finaliza el miércoles, tiene previsto publicar una declaración
conjunta para la que todavía no existe fecha exacta.