SIDNEY.- El Gobierno australiano anunció hoy que la empresa española Navantia asumirá la gestión de la construcción de tres destructores, proyecto que forma parte de la modernización de las Fuerzas Armadas del país.
"Navantia ha sido seleccionada para traer un equipo de gestión de
construcción naval con experiencia a ASC Pty Ltd (ASC) para maximizar el
rendimiento del programa hasta el final de la construcción de los tres
buques", informaron en una nota conjunta los ministros de Finanzas,
Mathias Cormann, y Defensa, Marise Payne.
Antes que Navantia, el proyecto estaba en manos de AWD Alliance,
formada por la Organización de Material de Defensa de Australia (DMO),
la estatal ASC (Corporación Australiana de Submarinos) y Raytheon
Australia.
Pero los problemas en las obras llevaron a la elaboración de una
auditoría que confirmó demoras y la necesidad de una inyección adicional
de 1.200 millones de dólares locales (868 millones de dólares o 799
millones de euros).
El plan original preveía que el primer buque, el HMAS Hobart, fuese
entregado en 2014 y, sin embargo, fue botado en mayo, mientras los otros
barcos llevaban un retraso de más de dos años.
Ante esa tesitura, el Gobierno australiano decidió buscar un nuevo gestor.
El comunicado oficial indicó que Navantia, en virtud de este proceso
de licitación "limitado", llevará a su equipo de diseño a los astilleros
de Osborne, en la ciudad de Adelaide (sur).
"El hecho de que hayan depositado la confianza para que asumamos la
construcción de los tres destructores que se están llevando a cabo en
Adelaide es una señal más de la confianza que tienen en Navantia",
declaró el presidente de Navantia, José Manuel Revuelta.
Por su lado, DMO, ASC y Raytheon Australia felicitaron a la empresa
pública española en un comunicado y ofrecieron su "estrecha
colaboración".
Otras medidas adoptadas por el Gobierno para reactivar este proyecto
han incluido mejorar la gestión de los astilleros de ASC en Adelaide.
Según la valoración hecha hoy por los ministros, la productividad ha
mejorado en un 35% y se han recortado en varios meses las demoras.
Navantia, una de las empresas españolas con mayor presencia en
Australia, entregó el viernes pasado a la Armada australiana el
portaeronaves HMAS Adelaide, el segundo de los dos buques que le habían
encargado.
Ambos portaeronaves y la gestión de la construcción de los tres
destructores abre la posibilidad de tener "importantes oportunidades de
cara a los programas que se van a llevar a cabo por parte de la Armada y
el Gobierno australianos", destacó Revuelta.
Navantia ha firmado el contrato con la australiana ASC por el que la compañía perteneciente a la Sociedad Estatal de Participaciones Industriales (SEPI) se compromete a colaborar en los trabajos de construcción de los destructores australianos 'AWC', que están basados en la fragatas 'F-100' de la Armada española, de cuyo diseño y ejecución se encargaron los astilleros de la Ría de Ferrol.
La firma del contrato tuvo lugar en la ciudad australiana de Sidney, en un acto que reunió a representantes del Gobierno de este país, de los astilleros ASC y de la empresa especializada en armamento y soluciones tecnológicas militares Raytheon. Navantia estuvo representada por Revuelta y por el director en Australia de la empresa española, Francisco Barón.
El contrato es parte de la 'Estrategia de Reforma de los AWD' iniciado por la Commonwealth de Australia en 2014 y contempla el apoyo de Navantia a ASC en la construcción de los tres destructores. La empresa pública española colaborará para poder materializar estos buques en el menor plazo posible, en una actuación que se está desarrollado en un complejo industrial situado en Adelaida, en el estado de South Australia.
Hasta la fecha, Navantia ha venido suministrando el diseño y algunos equipos y sistemas principales de los buques militares.
Este contrato llega en el momento en el que los dirigentes del país situado en el Océano Índico han decidido buscar soluciones para mejorar los problemas detectados durante la construcción de los buques, algunos de los cuales, como los bloques de las zonas de quilla, proa o popa, han sido fabricadas en los astilleros de Fene y Ferrol y enviados por mar hasta Australia, para su ensamblaje.
Desde 2007 Australia se ha convertido en el principal cliente para Navantia en cuanto a carga de trabajo, ya que tres contratos han permitido el poder colaborar en mayor o menor medida en la construcción de los buques destructores 'AWD', los dos buques anfibios del tipo 'LHD', recientemente entregada a la Armada de Australia, además de doce lanchas de desembarco realizadas en los astilleros de la Bahía de Cádiz.
Además de colaborar en la realización de estas obras, la empresa española ha sido la encargada de realizar los proyectos constructivos, lo que ha motivado también ocupación a la oficina técnica de la empresa, sobre todo a la situada en las instalaciones de Navantia Ferrol.
Navantia ha firmado el contrato con la australiana ASC por el que la compañía perteneciente a la Sociedad Estatal de Participaciones Industriales (SEPI) se compromete a colaborar en los trabajos de construcción de los destructores australianos 'AWC', que están basados en la fragatas 'F-100' de la Armada española, de cuyo diseño y ejecución se encargaron los astilleros de la Ría de Ferrol.
La firma del contrato tuvo lugar en la ciudad australiana de Sidney, en un acto que reunió a representantes del Gobierno de este país, de los astilleros ASC y de la empresa especializada en armamento y soluciones tecnológicas militares Raytheon. Navantia estuvo representada por Revuelta y por el director en Australia de la empresa española, Francisco Barón.
El contrato es parte de la 'Estrategia de Reforma de los AWD' iniciado por la Commonwealth de Australia en 2014 y contempla el apoyo de Navantia a ASC en la construcción de los tres destructores. La empresa pública española colaborará para poder materializar estos buques en el menor plazo posible, en una actuación que se está desarrollado en un complejo industrial situado en Adelaida, en el estado de South Australia.
Hasta la fecha, Navantia ha venido suministrando el diseño y algunos equipos y sistemas principales de los buques militares.
Este contrato llega en el momento en el que los dirigentes del país situado en el Océano Índico han decidido buscar soluciones para mejorar los problemas detectados durante la construcción de los buques, algunos de los cuales, como los bloques de las zonas de quilla, proa o popa, han sido fabricadas en los astilleros de Fene y Ferrol y enviados por mar hasta Australia, para su ensamblaje.
Desde 2007 Australia se ha convertido en el principal cliente para Navantia en cuanto a carga de trabajo, ya que tres contratos han permitido el poder colaborar en mayor o menor medida en la construcción de los buques destructores 'AWD', los dos buques anfibios del tipo 'LHD', recientemente entregada a la Armada de Australia, además de doce lanchas de desembarco realizadas en los astilleros de la Bahía de Cádiz.
Además de colaborar en la realización de estas obras, la empresa española ha sido la encargada de realizar los proyectos constructivos, lo que ha motivado también ocupación a la oficina técnica de la empresa, sobre todo a la situada en las instalaciones de Navantia Ferrol.