MADRID.- Un juzgado de lo mercantil ordenó hoy
miércoles a la Liga de Fútbol Profesional (LFP) "la inmediata
inscripción" del Murcia en la Segunda División, aceptando unas medidas
cautelares solicitadas por el equipo murciano después de que la LFP
acordase su descenso a Segunda B por motivos económicos.
El tribunal madrileño acordó "suspender cautelarmente la
decisión de la LFP de descender administrativamente al club de fútbol a
la Segunda División B por no cumplir con los ratios financieros que
exige la competición", dijo en una nota de prensa el Tribunal Superior
de Justicia de Madrid.
A primeros de mes, la Liga Profesional de Fútbol (LFP) descendió al Real Murcia a Segunda B y le impuso una multa de 180.000 euros después de que no cumpliese los criterios financieros de la competición.
En un comunicado en su página web en el que la LFP decía no haber recibido aún esta sentencia, afirma que el Murcia incurrió en infracciones referidas al mantenimiento de deudas con la Agencia Estatal de la Administración Tributaria por importe superior a 12 millones de euros.
El juez ordenó el miércoles la anulación de los acuerdos de la LFP, tanto de negar su inscripción como de acordar su descenso de categoría.
La decisión de admitir medidas cautelares, a instancia de una demanda del club, no puede ser recurrida y se basa en parte en el peligro de que el proceso judicial se demore más allá del asunto que trata, teniendo en cuenta que la próxima temporada da comienzo en pocos días.
El tribunal deberá ahora decidir si estima la demanda del Murcia contra la LFP.
El equipo acabó cuarto en segunda división la temporada pasada, pero no consiguió clasificarse durante la ronda eliminatoria para ascender a Primera.
Muchos clubes españoles han sufrido graves problemas económicos en los últimos años debido a los gastos excesivos y deben cientos de millones de euros en impuestos impagados.
El Real Murcia descendió a Segunda B una vez más en el pasado. Fue en 1992 cuando no consiguió cumplir con las nuevas reglas sobre las estructuras de los clubes de fútbol implantadas por el Gobierno.
A primeros de mes, la Liga Profesional de Fútbol (LFP) descendió al Real Murcia a Segunda B y le impuso una multa de 180.000 euros después de que no cumpliese los criterios financieros de la competición.
En un comunicado en su página web en el que la LFP decía no haber recibido aún esta sentencia, afirma que el Murcia incurrió en infracciones referidas al mantenimiento de deudas con la Agencia Estatal de la Administración Tributaria por importe superior a 12 millones de euros.
El juez ordenó el miércoles la anulación de los acuerdos de la LFP, tanto de negar su inscripción como de acordar su descenso de categoría.
La decisión de admitir medidas cautelares, a instancia de una demanda del club, no puede ser recurrida y se basa en parte en el peligro de que el proceso judicial se demore más allá del asunto que trata, teniendo en cuenta que la próxima temporada da comienzo en pocos días.
El tribunal deberá ahora decidir si estima la demanda del Murcia contra la LFP.
El equipo acabó cuarto en segunda división la temporada pasada, pero no consiguió clasificarse durante la ronda eliminatoria para ascender a Primera.
Muchos clubes españoles han sufrido graves problemas económicos en los últimos años debido a los gastos excesivos y deben cientos de millones de euros en impuestos impagados.
El Real Murcia descendió a Segunda B una vez más en el pasado. Fue en 1992 cuando no consiguió cumplir con las nuevas reglas sobre las estructuras de los clubes de fútbol implantadas por el Gobierno.