MADRID.- El Tesoro jugará un "papel de fondeo" en el
nuevo mecanismo que el Gobierno pondrá en marcha para aliviar las
necesidades de refinanciación y liquidez de las comunidades autónomas,
lo que significa que será el encargado de "garantizar" las cantidades
que los gobiernos regionales requieran.
Según ha explicado en rueda de prensa el secretario de Estado de
Economía, Fernando Jiménez Latorre, el Tesoro "garantizará que se
satisfacen las necesidades, sobre todo de vencimientos y liquidez, de
las comunidades autónomas en lo que queda de año una vez se identifiquen
y a medida que se sometan al mecanismo de financiación centralizada".
Para poder acogerse a esta asistencia, los gobiernos regionales
tendrán que asumir nuevas y "estrictas condiciones de estabilidad
económica y financiera", ya que la intención del Gobierno es que el
mecanismo "no perjudique la disciplina fiscal, sino más bien lo
contrario".
Por eso, Jiménez Latorre considera que el nuevo mecanismo "no debe
sembrar dudas sobre la calificación crediticia del Tesoro", y de hecho
el secretario de Estado asegura que, con arreglo a las "conversaciones y
contactos" que los responsables del organismo emisor han mantenido con
las agencias de calificación, "se valora positivamente el mecanismo
centralizado de refinanciación, sobre todo si va acompañado de un fuerte
condicionado económico y financiero" que forzará una mayor "disciplina"
a las finanzas públicas y está "en línea con todos los esfuerzos"
realizados en este sentido desde el pasado mes de diciembre.
Según adelantó el jueves el ministro de Hacienda, Cristóbal
Montoro, este fondo atenderá los vencimientos de las comunidades que no
puedan afrontarlos por sí mismas, aunque se usará de manera
"excepcional" y exigirá nuevas condiciones de saneamiento
presupuestario. Montoro
aseguró que en ningún caso servirá para "mutualizar el riesgo de las
comunidades autónomas".
Este instrumento, que fue aprobado este viernes
en el Consejo de Ministros, se enmarca en un plan de ajuste más profundo
que fue anunciado por el presidente del Gobierno, Mariano Rajoy, en el
Pleno del Congreso el pasado miércoles y que, sin embargo, no ha
suscitado una respuesta de los mercados tan positiva como se habría
podido esperar.
Preguntado por las causas de esta reacción, el secretario de
Estado ha reconocido que "es difícil interpretar a los mercados", aunque
considera que "necesitan un poco más de tiempo para ver que todas las
reformas se ponen en marcha, tanto a nivel nacional como europeo".
"Estamos en la línea adecuada, y necesitan un poco más de tiempo
para comprobar que las cosas se mantienen en su curso, que no hay
sorpresas, que la situación económica y financiera se estabiliza. Eso
explica que la respuesta de los mercados no sea tan inmediata", ha
afirmado, insistiendo en que si España "persevera en las políticas de
reformas y en el saneamiento de las cuentas públicas" la inversión
extranjera "acabará entrando", si bien para eso hace falta que antes
"desaparezcan las incertidumbres".
El IVA, en septiembre
La subida del IVA por la que se eleva el tipo general del 18% al 21% y el reducido del 8% al 10% entrará en vigor el próximo 1 de septiembre para no perjudicar a algunas actividades de la economía española, como el turismo.
El IVA, en septiembre
La subida del IVA por la que se eleva el tipo general del 18% al 21% y el reducido del 8% al 10% entrará en vigor el próximo 1 de septiembre para no perjudicar a algunas actividades de la economía española, como el turismo.
Así lo ha avanzado el ministro de Hacienda y Administraciones
Públicas, Cristóbal Montoro, en la rueda de prensa posterior al Consejo
de Ministros, donde ha recordado que agosto es un mes "muy importante"
para el turismo y para el comercio.
Además, el ministro ha recordado que todas las subidas de este
impuesto realizadas a lo largo de la historia se han anunciado con
cierto tiempo por las exigencias técnicas que requiere la modificación.
El cambio en el impuesto no implica modificaciones en el tipo
superreducido, el que grava los bienes de primera necesidad, que se
mantendrá en el 4% actual.
Montoro ha adelantado también que se realizará una nueva
clasificación de los productos gravados por el IVA, de forma que algunos
productos que ahora se gravan al tipo reducido pasarán al tipo general.
Esta nueva clasificación no afecta a los productos gravados
por el tipo superreducido, como la leche y el pan y algunos productos
culturales como los periódicos y los libros, salvo la compra de vivienda
nueva, que dejará de gravarse al 4% a partir de enero.
Los mayores cambios se aplicarán en el IVA reducido, que a
partir de septiembre solo gravará el transporte, la hostelería y la
cesta de la compra, lo que deja fuera numerosos productos, incluidos los
servicios funerarios.
Tributarán al 21% las entradas a espectáculos culturales como
teatros, cine y parques de atracciones, la peluquería, los cosméticos y
los servicios mixtos de hostelería.
Según Montoro, el aumento de IVA está en línea con lo
anticipado ya en el Programa de Estabilidad español presentado en el mes
de abril, en el que el Ejecutivo programó la política tributaria de
cara a los próximos años.
Esta política, según el ministro, se debe basar más en la
imposición indirecta para poder reducir los gravámenes sobre el trabajo,
de modo que la subida fiscal se compensará con una reducción de las
cotizaciones a la Seguridad Social en un punto este año y en otro punto
en 2014.
Montoro ha explicado que el Gobierno ha decido subir el IVA en
este momento porque era algo "obligado" por las circunstancias, las
recomendaciones que llegaron de Europa y por la "prioridad absoluta" de
reducir el déficit en el actual momento.
"No hay más remedio", ha dicho Montoro, tras recordar que el
Rajoy admitió en el Congreso que el proyecto del Partido Popular se
basaba en bajar impuestos, aunque haya tenido que hacer justo lo
contrario por circunstancias y por la excepcionalidad del momento.
De hecho, se ha comprometido a compensar las subidas de
impuestos en el futuro, algo que hará desde el año próximo con la bajada
de cotizaciones sociales que, a su juicio, favorecerá la creación de
empleo y compensará los efectos negativos de la subida fiscal.
Montoro ha obviado las críticas sobre las declaraciones que
hizo en el pasado denunciado la subida del IVA aprobada por el Gobierno
socialista, y ha recordado que su Gobierno también ha puesto en marcha
otras medidas como el gravamen temporal del IRPF.
De la misma forma, el Consejo de Ministros ha dado luz verde a
una serie de medidas fiscales que se suman a la subida de IVA, como la
creación de un gravamen nuevo dentro del Impuesto de Sociedades del 10%
sobre rentas de fuente extranjera, exclusivo hasta el 30 de noviembre de
2012.
En este mismo impuesto, el Gobierno ha ampliado la limitación
de la deducción por gastos financieros aprobada hace unos meses y la ha
extendido a todas las empresas en general, sin circunscribirse a su
pertenencia a un grupo mercantil.
También en este impuesto, el Gobierno ha elevado de forma
transitoria los pagos fraccionados, de forma que el importe mínimo se
eleva del 8% al 12%. El tipo aplicable también se incrementa para
entidades con un volumen de operaciones superior a los 10 millones de
euros.
Además, se ha limitado durante 2012 y 2013 la compensación de
bases imponibles negativas para entidades con una cifra de negocios
superior a 20 millones de euros.
En el IRPF, el Gobierno aumenta de forma temporal del 15% al
21% de la retención por rendimientos de actividades profesionales y el
ingreso a cuenta por rentas del trabajo derivados de impartir cursos,
seminarios o conferencias, obtenidos desde el 1 de agosto de este año
hasta el 31 de diciembre de 2013.