MURCIA.- Varios miles de personas, unas 7.000 según los convocantes, se manifestaron hoy por las calles de Murcia convocados por UGT y CCOO, bajo el lema conjunto 'Frente a la crisis: empleo, inversión pública y protección social', en el primer Primero de Mayo de la crisis económica. El fracaso de convocatoria de los sindicatos murcianos ha sido lo más sonoro de la jornada.
La manifestación partió, a las 11.30 horas, desde la Plaza Circular y discurrió por la Gran Vía hasta concluir en el Malecón, donde se procedió a la lectura de un manifiesto. La marcha, que iba precedida por un grupo de percusión que fue animando todo el recorrido, transcurrió sin incidentes, con la nota anecdótica de media decena de personas que acudieron con mascarilla protectora en prevención de contagio por la nueva gripe, aunque al final algunas de ellas se la quitaron.
Entre los globos gigantes de UGT y CCOO, uno de ellos con la forma de dirigible, podrían leerse varias pancartas, así como verse una bandera de Palestina y varias republicanas.
Por parte de CCOO, había una pancarta con el lema 'La crisis que la paguen ellos. Asamblea de Parados y afectados por la crisis de Molina de Segura', mientras que firmadas por UGT había otras dos que decían 'Por una negociación digna para todos los trabajadores del Grupo Hefame', y 'Gracias a Jesús Cámara, los trabajadores de Halcón hoy celebran el Primero de Mayo', en reconocimiento de la labor desempeñada por el representante sindical en la conservera evitando el cierre de la factoría.
Por su parte, la CGT llevó una llamativa pancarta en la que ponía 'Basta de huelgas domesticadas y despidos salvajes. Huelga general', que iba suspendida en el aire al pender de varios globos gigantes rojos y negros. Los jóvenes que estaban en este grupo, al llegar al Puente Viejo, salieron de la marcha para concluir su protesta en la Plaza Camachos.
El secretario general de CCOO, Daniel Bueno, aseguró que el de hoy es "un Primero de Mayo difícil, pues tenemos el récord histórico de desempleo en la Región, hemos superado la cifra psicológica de 4 millones de desempleados en el país, y afrontamos el futuro con mucha preocupación, compartida por todos los trabajadores".
Por ello, Bueno exigió "unidad de toda la sociedad en la defensa del empleo, para favorecer mayor inversión publica que solucione los problemas que tenemos, y un sistema de protección social sólido, que garantice que las personas en desempleo con penuria económica tengan prestaciones suficientes para poder seguir viviendo".
El presidente de la Comisión Gestora Regional de UGT, Antonio Jiménez, indicó que "es un Primero de Mayo comprometido, en el que la voz de los trabajadores se multiplica, la voz de los trabajadores en defensa de la inversión publica, de la protección social y por supuesto de un empleo que está siendo fulminado de una manera trepidante".
También acudieron a la manifestación los líderes de la oposición, acompañados por miembros de sus respectivas ejecutivas, militantes y simpatizantes. Así, el secretario general del PSRM-PSOE, Pedro Saura, recalcó que "estamos ante la manifestación más importante de los últimos años, porque en la Región hemos pasado del 9 por ciento de paro hace un año a prácticamente el 20 por ciento, más de doble".
"Los ciudadanos tienen que saber que hay dos vías para salir de la crisis", apuntó Saura, quien explicó que "una vía es la de bajar los impuestos a los ricos, reducir la inversión publica y abaratar el despido, que es el modelo de crecimiento del PP en la Región y que ha dado estos resultados, y la otra vía, progresista, que es la de mayor protección social, mayor inversión publica y otro modelo de crecimiento distinto".
Tras una pancarta con el lema 'Por un plan social económico contra la crisis' estaba el coordinador regional de IURM, José Antonio Pujante, quien defendió la necesidad de que "se preserven los derechos de los trabajadores, y que no haya ningún retroceso en la exigencia inmediata de cambio en la política del gobierno, tanto central como autonómico, ya que están aplicando medidas clásicas que en modo alguno suponen cambiar la situación para los trabajadores, que no tienen ninguna culpa de esta situación de crisis".
Otro fracaso en Cartagena
Alrededor de 500 personas acudieron en Cartagena a la manifestación del 1 de Mayo, en la que las centrales sindicales mayoritarias, CC OO y UGT, reclamaron a las Administraciones públicas una apuesta por el sector industrial como motor de la economía.
El lema de este 1 de Mayo, marcado por la crisis económica, fue en la ciudad portuaria 'Cartagena por el empleo y su industria'.
En este sentido, la secretaria general de UGT Cartagena, Manuela Hernández, afirmó que "debemos cambiar nuestro modelo productivo, otorgando mayor peso a la industria y la tecnología y con muchas más inversiones en estos campos. No hay que olvidar que aquí tenemos grandes compañías industriales como Sabic; Repsol, aunque ahora se encuentren en una situación delicada, el polígono de Los Camachos o el Parque Tecnológico de Fuente Álamo".
Por su parte, el secretario comarcal de CC OO en Cartagena, Juan Pedro Martínez, también reclamó un nuevo modelo económico y social, que se ha de lograr "en la negociación colectiva", e insistió en la idea de que las grandes industrias de la ciudad "son las que deben generar empleo, sobre todo en las pymes que trabajan para ellas".
Martínez recordó la situación de incertidumbre por la que están atravesando las contratas de la refinería de Repsol tras la parada de las unidades de destilación a causa de la caída de las ventas.
También aludió a la larga crisis por la que está atravesando la metalúrgica Española del Zinc -cuyos representantes sindicales asistieron también a la manifestación-, que lleva cinco años al borde del cierre "y que de llevarse a cabo su nuevo proyecto industrial supondrá la creación de 500 puestos de trabajo entre empleos directos e indirectos.
No faltaron los sindicatos minoritarios, como la CNT, o los jóvenes del PCE, que reclamaban con sus consignas una huelga general. También lucieron pancarta propia los trabajadores del sector de la seguridad privada, que recordaron que aún se encuentran sin convenio colectivo, y los trabajadores civiles del Arsenal, según recoge 'La Opinión'.