En primer lugar el informador dio una larga exposición sobre el proyecto que tenía preparado para los medios, el que iba a iniciar en las próximas semanas y que finalmente no hará.
También aclaró que Telecinco no le gusta, ya que es la responsable de "la telebasura o telemierda"; ante éstas declaraciones Jordi González salió al paso aclarando que es una cadena en la que se puede decir todo con total libertad.
Habló sobre 'Aqui hay tomate', dio unas lecciones a Vasile (consejero delegado de Telecinco) y a Carlotti (Consejero delegado de Antena 3) proponiendoles ganar menos dinero pero con mayor calidad en sus respectivas parrillas televisivas.
Más tarde les llegó el turno a los políticos. De José María Aznar explicó varias cosas, como su propósito de censurar y manipular la información tanto en Antena 3 como en Onda Cero, y dio su opinión sobre el hecho que Rajoy no tome ninguna decisión sin el beneplácito de Aznar. Al presidente Zapatero 'le faltan algunos hervores' fueron otras frases que sonaron anoche en la noria.
En cuanto a la gran pregunta: '¿Porqué no se despidió de sus oyentes en el programa de radio?', la respuesta fue muy clara, "porque si él hubiera dado una explicación en aquel momento de porqué dejaba el programa, hubiera hecho un flaco favor al PP y un gran favor al PSOE, ya que estaban próximas las elecciones generales. Y ninguno de los dos se lo merecía".
En cuanto a su "retiro" no definitivo, aclaró que su familia le había pedido que descansara por razones de salud.
José María García anunció que se "aleja" de su oficio de primera línea durante varios años, después de ceder a las peticiones de su mujer y dos hijos, y dejar aparcado un programa que iba a arrancar en breve sobre política y en el que también pretendía desentrañar cómo se habían enriquecido algunos famosos españoles.
En la entrevista en el programa "La Noria", García dejó claro que "yo no me retiro, me alejo". "Desaparezco de la lucha diaria. (...) Desaparezco del micrófono".
De este modo, José María García puso fin a las informaciones de las últimas semanas que le situaban al frente de un nuevo programa a partir de diciembre.
Explicó que "tenía pensado comenzar un programa que no tenía nada que ver con el mundo del deporte, casi de forma y manera inmediata. Y desde aquí tengo que pedirle perdón al empresario con el que prácticamente habíamos llegado a un acuerdo".
"Era un programa que me encanta y lamento profundamente no poder hacer. He tenido que poner sobre una balanza la familia o mis deseos", y ha pesado más la familia.
"Tenía concebido un programa para mí precioso. Una primera parte de ese programa era de componente político. Creo que los partidos políticos, tanto el partido en el poder como en la oposición, en asuntos trascendentales tienen que entenderse. No puede pasar lo que está pasando en el país", sostuvo García.
"HERVORES"
A su juicio, está gobernando un partido, el PSOE, que no esperaba ganar las últimas elecciones, con un residente, José Luis Rodríguez Zapatero, "con muy buena voluntad, con muy buenas maneras, pero al que le faltan uno, dos o tres hervores".
Y su equipo, prosiguió García, salvo "dos o tres excepciones", en las que incluyó a los dos vicepresidentes, María Teresa Fernández de la Vega y Pedro Solbes, y al ministro del Interior, Alfredo Pérez Rubalcaba, "se lo ha hecho un enemigo", con gente como el secretario de Organización del PSOE, "Pepiño Blanco", al que no le contrataría "ni de auxiliar administrativo".
Y en el PP, indicó José María García, que no esperaba perder los últimos comicios generales, "anida el revanchismo, la venganza, el odio y la persecución al que manda".
La primera media hora de su nuevo programa la utilizaría García para intentar que populares y socialistas "se pongan de acuerdo".
LOS RICOS
Y la segunda parte del programa conllevaba "muchos riesgos".
Citó un artículo de Carmen Rigalt en el que la periodista escribía que "todos los ricos son famosos. Sabemos por qué son famosos, son famosos porque son ricos, pero no sabemos por qué son ricos".
Esa parte, apoyada en un equipo de investigación, con el periodista Juan Luis Galiacho al frente, iba a tratar de "descubrir" y "poner sobre el tapete" la forma en que "20, 30 ó 35 ricos españoles, se han hecho ricos, de forma irregular, a costa de los demás".
Sin embargo, llegaron sus dos hijos y su mujer y le hicieron ver que, "si haciendo deporte, como es lo que he hecho, he tenido que estar con sobresalto permanente, tanto yo como mi familia, si ahora entro en esta situación, estando como está la política, y por otro la situación mediática, tendría que salir todos los días como José Tomás, no con su arte, pero sí con su valor, a que me cogiera el toro. Mi familia no se lo merece. Me ha pedido que no. Que merezco vivir más tranquilo, vivir más apacible. Me ha costado mucho tomar esa decisión", pero la ha tomado".
"No abandono, no me retiro, pero desaparezco de la circulación", indicó García, y "dentro de dos, tres, cuatro años, Dios dirá".
"Sí es rigurosamente cierto que ésta sí es por una larga temporada mi última entrevista. No me retiro, voy a hacer cosas nuevas, me voy a dedicar a la investigación" y a descubrir el mundo de Internet, entre otras tareas.
CONTRA TELECINCO
García, en su estilo más propio, arrancó la entrevista reprochando al presentador que se llevase cinco días anunciando este espacio para las diez de la noche, y la conversación no se iniciase hasta las doce.
Tampoco tuvo pelos en la lengua para decir que Telecinco, casa que ha elegido para su última entrevista, "no me gusta". "Creo que esta casa es la responsable en gran medida de la telebasura o de la telemierda, en gran medida".
"Digo esto de la misma forma que digo que ésta es una de las grandes empresas que mayores beneficios genera al año. Pero habría que decirle al señor (Paolo) Vasile -consejero delegado de Telecinco-, aquí, y al señor (Maurizio) Carlotti, en Antena 3, también consejero delegado-, oíga, ganen ustedes menos, y hágannos otra televisión. No pongan sucedáneos de periodistas, pongan ustedes profesionales de la información".- (Agencias)