¿Qué ha sido del efecto de las "100 medidas de Valcárcel" sin cambiar de política? Humo de pajas.
La insostenibilidad del modelo trae ya hambre tras la especulación desenfrenada ("Cáritas" lo puede acreditar por una mayor afluencia a sus comedores de vergonzantes de clase media), precariedad laboral, bajos salarios, desempleo desbocado y de larga duración, que castiga a jóvenes, mujeres e inmigrantes, agresión al medio ambiente... un despropósito total y ninguna autoexigencia.
Este modelo económico de Valcárcel, está más que agotado. Y lo dice ahora el presidente del ICO (Instituto de Crédito Oficial) y catedrático de Economía Aplicada, Aurelio Martínez, que ha estado en Cartagena este pasado viernes.
Porque Murcia ya es líder nacional en destrucción de empleo en todos los sectores, con 100.000 personas casi sin horizonte laboral y en riesgo objetivo de perder sus ahorros y hasta su casa. Todo un drama para algunos. (El ejecutivo hipotecario de Caja Murcia mañana a una viuda de Beniel, sin más recursos, no parece muy propio de una entidad de naturaleza benéfico-social sino más bien de una banca escocesa sin corazón. ¡Dios perdone a los responsables de tal falta de caridad en su infinita misericordia!).
El señor Sotoca, mucho menos preclaro de lo que yo le suponía en principio para los tiempos que corren, tiene por delante la mayor tarea de reciclaje profesional de la historia de esta región y dinero no le falta, de momento, para acometer un ambicioso Plan Regional de Formación para el Empleo pero para sacar verdaderamente a los murcianos de su falta o baja cualificación y para nada financiar a los sindicatos y a la patronal regional, tal como ha venido sucediendo con los fondos europeo de cohesión hasta rozar el fraude en ocasiones.
A ver si nos dejamos de sueños de grandeza y nos dedicamos, pues, más a lo que somos: una región agrícola. Ahora se apunta el fantasmón de Valcárcel a decir que la agricultura nos va a salvar en este trance difícil pero hasta anteayer, el muy zoquete, seguía con la anestesia electoral de Corvera y Cabo Cope. No sabe más porque no lee lo que debiera. Habla demasiado de oído. Y se cree con mucha experiencia política cuando su "corte" es de enanos y aprovechados de libro, incluidos esos columnistas oficiosos para contar lo que él, muy cobarde como todo bravucón, no tiene valor por miedo político a Génova 13.
Por eso hay que decir muy claro lo contrario de la propaganda pagada, que la situación de crisis ha dado carpetazo al aeropuerto privado innecesario y al mega proyecto de "resort" insostenible en Corvera y en la costa Águilas-Lorca. Y como muestra un botón: las tierras afectadas por la megalomanía de unos cuantos especuladores visionarios se están volviendo a arrendar para labor por un período de cinco años, hasta el 2013. ¡Vaya fe en sus propias ideas! ¿Ocurrencias, tal vez? Improvisaciones todos los días.
Por eso no se entiende bien (o si) que el ex consejero de Turismo, Ruiz Abellán, se fuese de viaje con suculentas dietas autonómicas a ver playas internacionales varias sabiendo ya que cesaba y emulando así los usos, costumbres y modos de su director general, Ángel Campos, personaje de una más que dudosa moralidad política con el gasto público, paralela a su fama bien ganada de "bont vivant" con el dinero ajeno. Me cuesta comprender que tenga algún recorrido con el consejero Cruz si éste es consciente del riesgo de escándalo seguro que corre con semejante personaje de tan acreditada biografía de abusos.
Ni hay demanda alternativa a un San Javier con dos pistas, aunque Valcárcel diga no entender lo de la segunda, por parte de las compañías aéreas (hasta "Air Berlín" parece haber dejado de creer en él), ni se ven inversores, judíos o no, para desarrollar la Marina de Cope.
Además, la virtual venta de "Itinere", la filial de concesiones de "Sacyr", puede complicar y dejar en el aire el proyecto de Corvera junto a la situación económica del resto de los socios de "Aeropuerto de Murcia S.A." y las exigencias de unos vecinos que, con los informes de la OMS (Organización Mundial de la Salud) en la mano, deben estar dispuestos a gozar de diez años menos de vida que el resto de los murcianos si no se adoptan medidas preventivas bastante costosas para los concesionarios. (¿Visitaron los máximos rectores de la CAM a Valcárcel para decirle que no están para poner dinero en algo que puede esperar o, quizás, para hablar de fusiones con otras cajas de ahorro? Ahora la de CAM con Caja Murcia tiene muchas más papeletas).
El hundimiento del mercado británico y, como mínimo, la falta de liquidez en "Polaris" - atrasa a 2009 sus obligaciones tributarias en Pacheco y Alhama- , deben ser aviso suficiente para pisar el suelo en vez de levitar tanto con una apuesta turística que se quiere de respuesta rápida cuando en la gran provincia vecina se está viniendo abajo por días este negocio ladrillero-hostelero.
Por eso, el director general de la CAM, Roberto López (el presidente Vicente Sala ha optado por un plano mucho más discreto), sigue dando el cante con las cuotas participativas en segunda emisión (¿quizás para que se las compre el Banco de España con los 25 billones de pesetas previstos para ayudar a entidades en apuros?), urgiendo a la desesperada esas ayudas del Gobierno y sus intenciones manifiestas sobre el fondo de pensiones de los empleados a cambio de una más que dudosa rentabilidad inmobiliaria. (Pedirle la garantía de su vejez a los trabajadores nunca lo debe hacer un verdadero empresario, y menos si es nacido en Alcoy).
No me creo ya ninguna de las cifras que presenten como reales nuestras dos entidades de ahorro. Les cuesta reconocer su situación absoluta y relativa, en un escenario de crónica falta de liquidez y con solvencias a la baja en general, a tenor de lo que dice S&P. Los excesos, a los que no son ajenas, parece causante del sufrimiento de muchas familias entre nosotros por falta de respeto al cliente en el endeudamiento y el sometimiento de sus ahorros a innovaciones de alto riesgo sin precisarlo con todo detalle.
Mientras gran parte del mundo financiero mundial las está pasando canutas, lo de Caja Murcia parece un cuentacuentos y lo de la CAM recuerda, cada día, más a aquella banquera portuguesa que reinventó la inversión piramidal. Puestas en cuestión por el propio sistema, tanto las empresas auditoras como las agencias calificadoras de 'rating', recomiendo guiarse ya por la propia intuición personal, por muy subjetiva que parezca, antes que por lo que nos digan las tan señaladas por Sarkozy.
Entretanto, el vicepresidente murciano de la CAM, el ex chambilero huertano, de Casillas, Ángel Martínez, parece estar provocando malestar entre los empleados y, a decir de algunos de ellos, comienza a ser un problema por los perjuicios que pueda estar causando a la entidad. La frase "Ha hecho bueno a Javier Guillamón" parece resumirlo todo y con la mayor precisión porque la cuenta de gastos de aquel, a costa de todos los impositores de la CAM, aún está inédita y es de Guiness.
Dicho lo anterior, la sociedad murciana agradecería saber (para constatar que no estamos ante unos directivos abusones de nuestra confianza, merecedores de un escarmiento) las retribuciones totales, dietas incluidas, de los señores Egea, López, Martínez y Sala, así como el importe de los blindajes contractuales de los dos primeros, ahora que, por los planteamientos exigentes, para con las responsabilidades a depurar entre los presuntos culpables de la crisis financiera, del "premier" Brown y el presidente Sarkozy, huelo en Murcia la activación civil de la lucha contra la corrupción por la abdicación de una izquierda política (el ministro-diputado por Murcia, Bermejo, sólo viene de boda y a Cartagena) que se muestra a la medida de la propia mediocridad del poder regional del PP. (A Saura se le ve ya muy desesperado por rascar unos cuantos votos entre una mafia del agua que ahora se mueve sin suerte trasvasista, migajas de Zapatero aparte, y perdiendo fuelle a estribor a toda pastilla, en un acelerado proceso de destrucción histórica del PSRM).
Y ahora que hasta IURM se suma desde su Asamblea regional a la estrategia trasvasista en busca de votos y en contra de la opinión expuesta por el líder nacional saliente, Gaspar Llamazares, causa mucha más hilaridad la conversión agrícola de Valcárcel y la impostura de los grandes tomateros de Mazarrón proclamando su resistencia numantina al ladrillo, cuando hace sólamente semanas preconizaban convertir los bancales en parcelas para edificar porque nuestra agricultura no podía competir ni con Marruecos por abajo ni con Holanda por arriba. ¡Qué caradura la de estos "lobbistas" de Proexport cazadores de subvenciones públicas!
Y no menor que la del sindicato mafioso del agua. Menos mal que la ministra de Medio Ambiente, Elena Espinosa, le ha dado una larga cambiada al procónsul Valcárcel, muy a la gallega, y le ha hablado de trasvases a largo plazo y si no hay otras alternativas. Pan, pijo y habas, que dicen en Cabezo de Torres. En cuanto a lo del Ródano, Murcia no puede hablar directamente con Francia. Ese papel sería, en cualquier caso, del Estado español por su defensa de los intereses generales del país. En política exterior, como dice mi amigo Jose, son de boina nuestros políticos.
Cuando llevamos más de diez años exigiendo la vuelta a una economía real en la Región de Murcia frente a tanto especulador de ocasión, no resulta nada reconfortante saber que la disolución acelerada de sociedades mercantiles, es cuatro veces mayor que la media española y una prueba del exterminio que Valcárcel, rehén de especuladores que lo han financiado, ha sometido a la empresa productiva murciana con sus propios votos; que nuestros jubilados cobran al mes casi 100 euros menos de pensión que la media de los jubilados españoles; que el curtido lorquino se resiste a la deslocalización productiva por asfixia financiera. O que nuestro gasto farmacéutico sigue creciendo a razón de más del 10% anual. ¿Quién hace el negocio, "Hefame"?
El único al que se ve indirectamente beneficiado por la crisis es al bachiller José Luis Mendoza, presidente de la Universidad Católica de Murcia. El desplome de la recaudación del Vaticano en un año, de 14.000 millones de euros a tan solo 1.400 por cepillos y utilidades varias, revalida su poder y le da alas por el óbolo tan cuantioso y creciente que lleva cada año al Papa. Esa avidez, tan poco evangélica, por el dinero, que le ha hecho poner a funcionar, sin todas las formalidades legales preceptivas, la carrera de Arquitectura, tal vez se explique por esa necesidad de congraciarse más que nadie con Roma en estos momentos de apreturas materiales para la Curia. ¡Ahí está el laico bueno de José Luis, el de Cartagena, para que el Colegio Cardenalicio no pase frío, que por algo es caballero de la Orden de San Gregorio!
Como vemos, el cambio de era se las trae y va a acarrear todo tipo de alteraciones en la búsqueda, también en Murcia, de los culpables de traición al sistema capitalista, los que venimos denominando hace meses como enemigos del sistema, por lo que no sería de extrañar que a la hora de pagar por esta fiesta, y en pleno 'garzonismo', alguien recuerde el comportamiento del hoy todavía secretario general de la CROEM, Clemente García, en 1975, cuando siendo alcalde falangista de Murcia y, tras los últimos fusilamientos del franquismo, desde el Ayuntamiento se enviaron telegramas de adhesión al Palacio de El Pardo aquel negro mes de septiembre.
Ya digo, cambio de era y desalojo ordenado de los culpables de tamaño desaguisado. Es lo que toca.