MURCIA.- El Gobierno regional reclama al Estado
más recursos para la acogida y el alojamiento de los menores extranjeros
no acompañados en los Centros de Protección de Menores gestionados por
la Comunidad Autónoma de la Región de Murcia, según fuentes del
Ejecutivo murciano.
Esta es una de las demandas que el secretario
general de la Consejería de Familia e Igualdad de Oportunidades, Manuel
Marcos Sánchez, expuso en la Conferencia Sectorial de Inmigración,
presidida por la ministra de Trabajo, Migraciones y Seguridad Social,
Magdalena Valerio, que, antes de la reunión, ya adelantó que el Gobierno
socialista quiere «hacer los deberes» en relación a la migración y
pedía la «colaboración» de las comunidades autónomas en los centros para
acoger temporalmente a los migrantes que están llegando a España.
Sánchez
ha indicado que la Comunidad ha atendido con recursos y fondos propios a
un total de 538 menores no acompañados desde enero de 2017. El año
pasado la Región acogió a 412 menores que llegaron a sus costas sin
acompañamiento de adultos, concentrándose en el último trimestre del año
un total de 250, lo que dio lugar a una situación de alarma social que
tuvo que solucionarse a través de la creación urgente de un centro
específico de atención, al carecer el sistema público de protección de
plazas suficientes para atenderlos.
La
Comunidad Autónoma mantiene en la actualidad a 126 menores extranjeros
no acompañados en sus centros propios.
En los últimos años se ha
incrementado el número de llegadas irregulares de personas migrantes a
la costa de la Región de Murcia, que se encuentra a tan solo 200
kilómetros de las costas africanas del Magreb. En concreto, el año
pasado fueron 2.000 los migrantes que se recibieron.
«Hemos
pasado momentos muy difíciles en 2017, pues en tan solo una noche
llegaron 600 personas, por lo que reclamamos al Gobierno central que
favorezca una inmigración legal, vinculada a contratos de trabajo y con
controles en los países de salida», ha expuesto Sánchez.
«La Región
reclama presupuesto y medidas concretas, frente a acciones
electoralistas», según Sánchez, quien ha considerado que «no se puede
lanzar mensajes a las mafias que trafican con seres humanos, el drama de
las personas que tienen que huir y salir de sus países sólo se podrá
defender desde el diálogo y la política, rechazando la demagogia y la
retórica vacía a la hora de solucionar los auténticos dramas humanos que
sufren los inmigrantes y también los refugiados».
«Es
un asunto muy complejo y que exigen mucha acción política», ha
explicado el secretario general de la Consejería de Familia e Igualdad
de Oportunidades, que ha remarcado que «los culpables son las mafias,
las víctimas son los inmigrantes y el Gobierno central es el responsable
de dar respuesta a esta situación».
Acción «conjunta y coordinada»
Al
respecto, la ministra de Trabajo, Migraciones y Seguridad Social,
Magdalena Valerio, anunció que el Ejecutivo de Pedro Sánchez no tiene
previsto destinar más fondos y recursos «de aquí a final de año» para
políticas de inmigración, a pesar de que así lo reclaman los distintos
territorios ante el incremento de las llegadas de migrantes en patera,
como es el caso de Murcia.
«Me
encantaría tener un fondo sin fondo para poder ir sacando dinero para
trasferir dinero a todo el mundo, pero en estos momentos estamos
ejecutando un presupuesto», ha recalcado, tras ser preguntada si el
Ejecutivo tiene previsto articular más dotaciones ante la situación
migratoria.
Valerio ha indicado
que la dotación del fondo de apoyo a la acogida e integración para
inmigrantes no está presupuestada para este año y sí lo estará para las
cuentas de 2019.
Asimismo, la
ministra apostaba por una acción «conjunta y coordinada» entre el
Gobierno, las comunidades y los ayuntamientos para afrontar el aumento
de la presión migratoria en España.
En
su intervención, ha reiterado que el Gobierno no contempla iniciar un
proceso de regularización de inmigrantes y ha incidido en la necesidad
de invertir en cooperación en los países de origen de los inmigrantes
como «única manera de que no exista efecto huida».
Pese
a lo prolongado de la reunión, que ha durando 4 horas, no se ha
acordado ninguna medida concreta para abordar la situación migratoria en
España.
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