domingo, 28 de junio de 2009

Medio millar de personas protestan contra los planes de Viudes en El Gorguel

LA UNIÓN.- Alrededor de medio millar de personas secundaron ayer la convocatoria de la plataforma cívica 'La Región de Murcia no se vende' para la VII Marcha del Litoral, en este caso en forma de protesta por los planes del presidente de la Autoridad Portuaria de Cartagena, Adrián Ángel Viudes, en torno a la cala de El Gorguel, donde pretende construir una dársena de contenedores pese a la agresión ambiental que supone para la flora y fauna marinas e, incluso, la Sierra Minera.

Entre los asistentes, destacados líderes de la sociedad civil regional más concienciada con los temas medioambientales como Paco Morote, Caridad de Santiago, Mercedes Noval, Pedro Baños, Javier García del Toro, José de Haro, Esther Herguedas, Pedro García, Julia Martínez, Miguel Ángel Esteve o Francisco Cutillas, que acudieron convocados por ANSE y 'Ecologistas en Acción'.

Casi todos recorrieron a pié los siete kilómeros de distancia entre el caserío de Portmán y El Gorguel para terminar posteriormente unos 240 degustando un caldero de la zona mientras otros pocos lo hicieron en piragua o a bordo del barco de ANSE.

También se echaron en falta este año a clásicos de estas marchas en ediciones anteriores. Tampoco estaba el alcalde de La Unión, Francisco Bernabé del PP, y opuesto frontalmente al citado proyecto por entrar en contradicción con la regeneración de la bahía de Portmán.

La exposición del motivo de la convocatoria al comienzo de la marcha corrió a cargo del dirigente vecinal local Sergio Cerezuela, que dio paso al profesor Miguel Ángel Esteve, encargado de leer el comunicado redactado por la plataforma civil 'La Región de Murcia no se vende', organizadora de la marcha como todos los seis años anteriores.

En el mismo se dice que “los vecinos de Portmán, los vecinos de La Unión y los componentes de distintos grupos ambientalistas y sociales, preocupados por la propuesta de un macropuerto de contenedores en El Gorguel por parte de la Autoridad Portuaria de Cartagena y la Administración regional, nos vemos obligados una vez más a protestar enérgicamente ante lo que consideramos un nuevo atentado a nuestro medio ambiente”, obra que, según se afirma, “vuelve a dirigirse a un tramo de costa, a unos paisajes y unos ciudadanos que han sido maltratados una y otra vez, desde hace décadas, bajo la excusa de un interés general que siempre ha ocultado intereses estrictamente particulares”.

El escrito denuncia que la proyectada dársena de El Gorguel “intensificará aún más la degradación de la zona y comprometerá el futuro de la regeneración de la Bahía de Portmán”. Se exige, pues, una reparación, pues “Portmán y El Gorguel son acreedores de una deuda histórica social y ambiental”, deuda que “sólo puede saldarse con la regeneración de esta bahía, con un uso inteligente, no depredador, de las oportunidades turísticas de este segmento excepcional en calidad paisajística de la costa murciana”, respetando, en todo caso, “las distintas figuras de protección y catalogación (ZEPA, LIC, BIC) por todos los estamentos competentes en conservación de la Naturaleza y del patrimonio cultural”.

“Las obras proyectas en El Gorguel aterrarán dos calas completas y afectarán a unas 330 hectáreas de fondos marinos en fase de recuperación, con hábitat protegidos, modificarán severamente la dinámica litoral y la calidad de las aguas”, advierte el escrito, que también incide en el preocupante hecho de que “se extinguirá el 40% de las aves rapaces del área, todas ellas amenazadas, junto con la eliminación de un contingente estimado de 4.500 ejemplares de flora protegida”.

“La propuesta del macropuerto”, continúa el escrito, “supondrá, por tanto, una pérdida grave en los distintos valores ambientales reconocidos internacionalmente por la Red Natura 2000, así como un severo desprecio por el excepcional patrimonio geológico e histórico que atesora la zona”, por lo que se pide a las autoridades responsables del proyecto que “rectifiquen y superen su hipocresía, su insensibilidad y su miopía social y ambiental”.

El comunicado termina agradeciendo al Ayuntamiento de La Unión su “inequívoca postura contraria al proyecto de El Gorguel”, y pide “sentido común, ética, coherencia y responsabilidad a la Administración central, para que ejerza sus competencias y frene definitivamente esta locura”.

La banca española cerrará 10.000 sucursales y despedirá a 35.000 empleados

MADRID.- España se ha caracterizado por tener más oficinas, más cajeros y más empleados de banca que Alemania, Francia, Italia o Reino Unido en propoción a la población. En España hay una oficina por cada 986 habitantes; en la eurozona, una por cada 1.735. Hasta la llegada de la crisis no se encendían las alarmas porque el negocio crecía más que en el resto de países europeos. Pero no era oro todo lo que relucía. La financiación del ladrillo -ahora en franco declive- justificó hace años la fuerte expansión de oficinas, pero hoy es insostenible. Toca cerrar sucursales y reducir plantillas: una reconversión industrial en toda regla. Hasta ahora estos ajustes se han soportado con los altos beneficios, pero hoy la cuenta de resultados no aguanta ese golpe, según 'El País'.

¿Cuántas oficinas sobran? Esa es la pregunta del millón. Dependerá de la rapidez de la recuperación económica, la estabilización del sector inmobiliario y la capacidad de las entidades para fusionarse. Se especula con un excedente de "entre el 20% y el 25% de la red actual", según Juan María Nin, director general de La Caixa. Eso supondría unas 10.000 oficinas y 30.000 trabajadores.

Hay varios análisis parecidos: el FMI también habló de un 20% de exceso en la red española. PriceWaterhouse va más lejos: sobra el 30% del sector, unas 12.000 oficinas y 35.000 empleados. Joaquín Maudos, del Instituto Valenciano de Investigaciones Económicas, cifra el sobrante en unas 7.000 sucursales; dos terceras partes corresponde a las cajas.

José María Martínez, líder de Comfia-CC OO, considera que puede quedar ocioso el 15% de la red, "pero sólo unos 6.000 empleados", por la capacidad de la banca para reabsorber plantilla.

Si las entidades no pueden asumirlo, ¿quién pagará esa factura? En principio, el Gobierno (es decir, los ciudadanos), que acaba de aprobar el Fondo de Reestructuración Ordenada Bancaria, que podría inyectar hasta 100.000 millones bajo el control del Banco de España.

El objetivo es que al final de esta crisis el sistema financiero "no esté debilitado, destrozado", en palabras de Juan Ramón Quintás, presidente de la patronal de las cajas. Aunque ese dinero no saldrá gratis: las entidades deberán devolverlo tras las fusiones, absorciones o reestructuraciones en un plazo máximo de siete años. Al menos en teoría.

El Gobierno y los expertos consideran que hasta que no se saneen los bancos y cajas débiles -y desaparezcan buena parte de ellos- no llegará el crédito a empresas y familias. En pocos meses, en cuanto se ha pinchado la burbuja y se ha disparado el paro, se han multiplicado los problemas del sector en forma de morosidad, caída de provisiones, excesivo endeudamiento y falta de liquidez. Con tantos quebraderos de cabeza, conceder créditos ha dejado de ser un objetivo prioritario.

Llegada la hora de reestructurar, el Gobierno ha tenido en cuenta que el sector tiene dos caras bien distintas. Las cajas poseen 24.822 oficinas, frente a las 15.372 de los bancos hasta marzo pasado y las poco más de 5.000 de las cooperativas de crédito.

El problema es que desde el inicio de la burbuja, en 2001, las cajas han abierto 5.000 oficinas y han contratado a 44.000 empleados. Sus competidores han aumentado la red en sólo 616 sucursales y han reducido plantilla en 20.000 personas. Alguien se ha equivocado.

Hay más diferencias. Los bancos manejan 53 millones de crédito por oficina mientras sus competidores tienen 35 millones, un 33% menos. Y, según los datos del Banco de España, el 60% del crédito está relacionado con el sector inmobiliario. Pero esos préstamos pesan más en el balance de las cajas, más expuestas que los bancos al pinchazo del ladrillo.

Por eso, a la hora de reducir sucursales, las cajas tienen más papeletas para llevarse la palma. José María Martínez, de CC OO, cree que si se sigue el modelo puesto en marcha por La Caixa, Banesto y el Banco Popular, se podrá "recolocar parte del personal excedentario, prescindiendo de los trabajadores eventuales pero sin grandes despidos o prejubilaciones".

Ese sindicato calcula que unos 13.500 trabajadores de las cajas, el 10%, tienen más de 55 años. Es una buena pista.

José Miguel Villa, secretario general de la Federación de Servicios de UGT, considera muy difícil hacer cálculos de cierres "hasta que no se sepa si habrá o no fusiones interregionales". "Si se unen entidades de una misma región, el solapamiento de oficinas y excedentes de empleo será mayor, porque también sobrarán servicios centrales".

En opinión de Villa, lo ideal sería seguir el modelo de los grandes bancos, que han reducido plantilla de manera pactada con prejubilaciones.

Los expertos consideran que si algo tiene a su favor la banca española es que está acostumbrada a recortar gastos. José Carlos Díez, de Intermoney, destaca que la banca ha sido flexible en el pasado: en los años ochenta las cajas pasaron de más de 80 a las 45 actuales y los bancos protagonizaron las primeras fusiones con la llegada del euro, que exigió muchos cierres. Joaquín Maudos dice que eso se hizo en tiempos de bonanza económica.

"Siempre hay un desfase entre la economía y la situación de la banca. El sector sólo puede ir a peor", avisa.

Las seis grandes entidades españolas suman 18.000 oficinas, casi el 55% del total, pero tienen estrategias diferentes. Y suelen marcar tendencias. El líder en oficinas es La Caixa, con 5.392, las mismas que suman juntos BBVA y Santander.

Desde 2000 ha abierto 1.530, aunque empezó a cerrar el año pasado. Reconoce estar inmersa en un "plan de optimización de la red" -suprimirá otras 150 en 2009- y lo cierto es que su ratio de eficiencia (que mide lo que gasta por cada 100 euros que ingresa) es el peor entre los grandes de la banca.

El segundo con más oficinas es BBVA: 3.309, con el objetivo de acabar el año con 100 menos. Es la primera entidad que vio venir el exceso de capacidad y comenzó los cierres en 2006, a diferencia del Santander, que prefiere no reducir su red y sostiene que sus 2.933 oficinas actuales "son las adecuadas".

El Popular tiene 2.185 sucursales y cerrará hasta 300 este año y el que viene. Es el rey en términos de eficiencia, pero reconoce estar muy pendiente de los gastos en plena crisis. Caja Madrid, con 2.168 oficinas, no tiene planes de cierre, y Banesto tiene previsto transformar oficinas en agencias financieras, con menos costes, pero sin cerrar sucursales.

La Región superó en diez puntos a España en los indicadores de relaciones comerciales con el extranjero en 2008

MURCIA.- La directora de Economía y Planificación, Esther Ortiz, afirmó hoy que la Región superó en diez puntos a España en tasa de apertura con el extranjero en 2008 (53 por ciento), "lo que indica que somos un territorio económico muy abierto a las relaciones comerciales con otros países".

Así se desprende de la 'Estadística de Comercio con el Extranjero', publicación elaborada por el Centro Regional de Estadística de Murcia (CREM), perteneciente a la Dirección General de Economía y Planificación de la Consejería de Economía y Hacienda.

Al respecto, Ortiz explicó que en esta estadística "se dispone del valor de los flujos de exportaciones e importaciones con origen o destino en la Comunidad, clasificando dichas operaciones según el producto de que se trate y el país de destino/origen".

Esta información es útil para la elaboración de los índices de Valor Unitario (IVU), que son indicadores de la evolución de los precios de los bienes comerciados con otros países.

El próximo día 6 de julio, el CREM, junto al Instituto Vasco de Estadística (EUSTAT) y el Instituto Galego de Estatística (IGE), publicarán los IVU de sus respectivas comunidades autónomas, con la misma metodología que ya está aplicando el IGE, informó el Gobierno regional en un comunicado.

En este sentido, la directora general recalcó que dicha publicación "es un hito, porque se han unido tres organismos oficiales de Estadística para obtener unos índices homogéneos y comparables y, además, ofrece una información económica que permite aproximar la evolución de los precios de las exportaciones e importaciones, utilizarlos como deflactores para seguir la evolución en volumen del comercio exterior, eliminando el efecto de las variaciones de los precios o construir indicadores como la relación real de intercambio o los índices de competitividad".

Por último, manifestó que "aunque existen índices de Valor Unitario incluidos en el Plan Estadístico Nacional del Instituto Nacional de Estadística, esta metodología es mucho más actual y es seguro que se van a unir nuevos organismos de otras comunidades autónomas".

Valcárcel viaja a Moscú para un 'efecto llamada' de turismo residencial ruso

MURCIA.- El presidente de la Comunidad Autónoma, Ramón Luis Valcárcel, encabeza una misión institucional y comercial a Moscú en la que intervienen 35 representantes de asociaciones productivas, empresas y entidades financieras dentro del Plan de Promoción Exterior de la Región de Murcia.

El objetivo de esta acción es incrementar las relaciones comerciales con la Federación Rusa, un mercado que ha sido calificado como "estratégico" por los técnicos de la Consejería de Universidades, Empresa e Investigación por las grandes posibilidades que ofrece, y favorecer la internacionalización del tejido productivo murciano.

La agenda de la misión contempla una treintena de reuniones de trabajo institucionales y comerciales desde mañana lunes hasta el miércoles, según informó el Gobierno regional en un comunicado.

Entre los encuentros más destacados están el que mantendrá el jefe del Ejecutivo murciano con el viceministro de Agricultura, Koroliov Serguey Valerievich, y otro con el viceministro de Desarrollo Regional de la Federación Rusa, Roman Panov.

Asimismo, la Comunidad Autónoma ha organizado junto a Financial Times, un seminario de captación de inversiones en el que se expondrán a importantes grupos inversores las posibilidades de la Región para acoger proyectos empresariales de alto valor añadido, y otro sobre promoción inmobiliaria.

La misión comercial murciana cuenta con una "amplia" presencia de representantes de sectores productivos de la Región con grandes posibilidades de aumentar sus exportaciones al mercado ruso, como es el caso de la alimentación y la conserva, así como el mueble y la madera.

En concreto, los representantes de la Federación de Cooperativas Agrarias (Fecoam), la Asociación de Productores y Exportadores de Frutas y Hortalizas (Proexport), la Asociación de Productores Exportadores de Frutas y otros Productos Agrarios (Apoexpa), la Asociación Interprofesional de Limón y Pomelo (Ailimpo) y la Asociación de Conserveros, así como empresas murcianas, mantendrán reuniones de trabajo con grupos y compañías importadoras rusas para buscar alianzas estratégicas, y mostrar la calidad y garantías sanitarias de los productos murcianos.

Asimismo, el Consorcio Exportador del Mueble de la Región de Murcia y la Asociación de Promotores Inmobiliarios cuentan con su propia agenda de reuniones con grupos empresariales de la Federación Rusa elaborada por los técnicos del Instituto de Fomento.

Otro de los grandes objetivos de la misión a Moscú es la promoción turística, que mostrará la oferta de la Región bajo el lema 'No-Typical'. En este sentido, cabe destacar los encuentros con los principales touroperadores rusos y las acciones directas que se realizarán en el centro comercial GUM, el principal de la capital rusa, situado junto a la plaza Roja y que todos los días recibe la visita de miles de clientes.

La agenda de los participantes en la misión se completa con las reuniones del presidente de Confederación Regional de Organizaciones Empresariales de Murcia (Croem) y los presidentes de las Cámaras de Comercio con sus homólogos rusos y los encuentros de la delegación murciana con el embajador y los representantes de la Embajada de España en Moscú.

Ginés Huertas, todo un carácter y una estupenda sencillez / Concha Cano

Conocí a Ginés Huertas en el año 2000, elaborábamos juntos uno de sus proyectos, un libro sobre la historia de su empresa al cumplir los cien años de trayectoria profesional. Era un hombre afable que inspiraba confianza, y durante las numerosas tardes que nos reunimos para recopilar datos, fotografías, organizar, redactar y corregir, hasta completar el libro, se ganó mi afecto y admiración.

Su pequeña agenda de bolsillo era, verdaderamente, una de las cosas que consideré más mágicas de un gran empresario como él, cuyas sociedades movían miles de millones al año. Pero me di cuenta pronto de que no necesitaba más, porque era muy inteligente y meticuloso, con una gran capacidad de esquematizar, por lo que cualquier apunte en esa agenda estaba ampliamente desarrollado en su mente.

Se sentía orgulloso de su familia y del gran grupo empresarial que habían logrado crear a lo largo de cinco generaciones en aquellos momentos (él pertenecía a la cuarta generación). Rehusó tener protagonismo en el libro “Huertas. Un siglo de historia”, pese a que era el presidente del grupo.

Él quería contar el desarrollo de sus empresas y agradecer a sus antecesores y a las nuevas generaciones su trabajo y apoyo dentro de las mismas.

Bajo el lema familiar “labor omnia vincit”, el grupo Huertas comenzó con un pequeño taller en 1900 y, como dejamos constancia en el libro, su creación y desarrollo fue paralelo al de la historia de la automoción.

Ha sido, y seguirá siendo, uno de los grandes empresarios que ha tenido esta Región. Su capacidad de ver más allá en los negocios y su gran determinación, lo llevó a implantar su criterio frente a la mismísima Mercedes Benz.

Las instalaciones que inauguró en Murcia sobrepasaban las dimensiones recomendadas por la Benz, establecidas en todos los concesionarios europeos de esta marca, excepto en las murcianas de Huertas, quien conocía a sus clientes y logró que Mercedes autorizase las que él consideraba que se ajustaban a su clientela y a las necesidades de su negocio.

Ginés Huertas combinaba a la perfección todo un carácter con una sencillez especial.