MURCIA.- La Guardia Civil ha inmovilizado más de una tonelada de alimentos, la
mayoría caducados, tales como productos cárnicos, pescados, conservas,
refrescos, cereales, azúcar y complejos vitamínicos, entre otros, en 27
establecimientos de la capital murciana, así como en Molina de Segura,
Alcantarilla, Cieza, Jumilla, Caravaca de la Cruz, Cehegín, Mula, Torre
Pacheco, Fuente Álamo, Lorca y sus diputaciones, Alhama de Murcia y
Águilas en la Región de Murcia.
Las inspecciones se enmarcan en
la operación a nivel nacional denominada 'OPSON IV', coordinada en la
Región con la Consejería de Sanidad, según fuentes de la Benemérita.
Para realizar estas inspecciones se
han formado seis equipos de inspección que lo integran 30 agentes del
Servicio de Protección de la Naturaleza (Seprona) y seis inspectores del
Servicio de Seguridad Alimentaria de la Comunidad. Estos equipos mixtos
han denunciado 87 infracciones recogidas en las leyes que regulan
materias tan importantes como Sanidad, Salud Pública, Seguridad
Alimentaria y Nutrición, Industria y Protección Ambiental.
La
mayoría de las infracciones detectadas en las inspecciones han sido por
carecer del preceptivo carné de manipulador de alimentos, almacenar
productos alimenticios en lugares no apropiados para ello, productos que
carecen de etiquetado o que presentan deficiencias en el mismo,
encontrarse a la venta productos caducados, carecer de registro
sanitario y deficiencias en limpieza e higiene entre otras.
El
objetivo principal es detectar actividades irregulares en unas fechas
donde el incremento del consumo provoca la puesta en el mercado de
alimentos que no cumplen con los requisitos de seguridad alimentaria,
falsificación de etiquetados y denominaciones de origen, la adulteración
y venta de productos caducados o en mal estado, así como el transporte,
distribución y almacenaje de alimentos sin control sanitario o sin
respetar otros requisitos legales.
Algunas de las infracciones en
materia documental no están relacionadas con la legislación
alimentaria, sino con documentos genéricos para la apertura y
funcionamiento de establecimientos de venta de alimentos, como carecer
de licencia de apertura.
Con esta campaña se pretende concienciar
a distribuidores y comerciantes de la necesidad de observar el
cumplimiento de la normativa nacional y europea en materia de seguridad
alimentaria, así como al consumidor para que preste atención a los
etiquetados y la calidad de los productos que adquiere
Durante
las inspecciones desarrolladas, en concreto en tres restaurantes, se
detectó la existencia de una "considerable cantidad" de productos
perecederos caducados, carnes y pescados, la mayoría de éstos adquiridos
en una cadena de supermercados.
Por este motivo, la Guardia
Civil ha abierto una investigación para descartar una posible
vinculación ilícita entre ambos, ya que, de ser así, ambas mercantiles
se beneficiarían mutuamente: los supermercados por dar salida a
productos que tendría que desechar y los restaurantes por adquirir
mercancía a un precio muy inferior al de mercado, con el consiguiente
riesgo para la salud de los consumidores de estos productos. Los
alimentos caducados han sido inmovilizados y se han denunciado todas las
infracciones detectadas.
En caso de detectar alguna irregularidad en la fabricación,
distribución, comercialización y consumo de productos alimenticios se
aconseja ponerse en contacto con la Guardia Civil en el teléfono '062',
así como consumir en estas fechas en sus establecimientos habituales.
En caso de dudas sobre el producto preguntar sobre su procedencia y características a los responsables del establecimiento.
Y
cuando se consuma en establecimientos en los que no suele hacerlo,
comprobar que el etiquetado del producto está en alguna lengua oficial
de España
Hay que revisar la fecha de caducidad de los productos
que se compran y desconfiar de precios anormalmente reducidos y que se
alejen del coste normal del producto, especialmente cuando se trate de
productos de marca o con denominación de origen.
Finalmente, en
caso de duda, se puede consultar a la Agencia Española de Seguridad
Alimentaria y Nutricional, organismo competente en esta materia.