LORCA.- El Ayuntamiento de Lorca ha anunciado una revisión a la baja de los
valores catastrales que gravan a 1.320 familias y que en algunos casos
incluirá una reducción de hasta el 80% del importe de sus recibos del
Impuesto de Bienes Inmuebles, un concepto por el que el consistorio
dejará de ingresar unos dos millones de euros al año.
Lo anunció el alcalde, Francisco Jódar, quien señaló que el Consistorio «ya
tiene preparada la ponencia de valores catastrales con la revisión a la
baja» que entrará en vigor el primer día hábil de 2015, una vez
cumplidos los diez años de incremento anual del diez por ciento del
denominado 'catastrazo'.
Jódar explicó que esta revisión pretende
acabar con la situación de «injusticia» que afecta a estas familias, que
durante la última década han pagado el IBI en su variante urbana pese a
tener terrenos rústicos en los que no se podía urbanizar, construir ni
obtener licencias para ello.
La revisión a la baja de los valores
catastrales afectará a familias que poseen suelo urbanizable sectorizado
con o sin elementos de desarrollo aprobados y que suma una superficie
conjunta de 33,4 millones de metros cuadrados correspondiente a 59
sectores de suelo de todo el término municipal. Jódar ha expuesto que la
reducción media del importe del recibo del IBI será de del 65 por
ciento, aunque en casos puntuales alcanzará el citado 80 por ciento.
Para
los ciudadanos que posean suelo urbano no consolidado, el Consistorio
ha iniciado un proceso de revisión del plan urbano, con el fin de que de
que «paguen un IBI adecuado a la realidad atendiendo a las
características particulares de cada caso».
Las soluciones del
Consistorio también se traducirán en una adecuación a la realidad del
Impuesto sobre el Incremento del Valor de Terrenos Urbanos, las
plusvalías, cuyo importe también «resultaba exagerado e injusto por el
valor catastral tan elevado con el que contaban», dijo Jódar, que señaló
que cuando se produzcan transmisiones también se reducirá ese precio.
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