Los hechos se han registrado sobre las 12.15 horas de este sábado en la Cala Este de Santa Pola, frente a la isla de Tabarca. Un socorrista que estaba realizando su trabajo en una playa del municipio ha avistado el suceso y ha alertado de lo ocurrido, según Cruz Roja.
El accidente en pleno vuelo ha sido presenciado también por multitud de personas que en ese momento llenaban la zona de playa así como otras que se encontraban en un chiringuito sobre el dique y a escasos metros del lugar del accidente.
Los testigos coinciden que esta especie de autogiro - un avión ultraligero con rotor de palas- sobrevolaba a baja altura y que en una maniobra de giro cayó perpendicular al mar. De inmediato, muchos de los bañistas se lanzaron al agua para intentar socorrer al piloto.
Hasta el lugar de los hechos se han desplazado miembros de la entidad humanitaria con la embarcación LS Plutón --utilizada para labores de salvamento marítimo-- que han localizado al hombre que viajaba en el pequeño helicóptero y lo han llevado hasta la orilla puesto que no se había hundido con su aparato.
Allí se encontraban una ambulancia de Cruz Roja y otra del Servicio de Atención Médica Urgente (SAMU), cuyos efectivos sanitarios no han podido hacer nada por salvar la vida de la víctima y han confirmado su defunción, ha indicado el CICU.
Vecino de la pedanía murciana de Santa Cruz, muy cerca de Orihuela, Baños despegó hoy sobre las diez de la mañana del aeródromo de la también pedanía murciana de Sucina junto a otro ultraligero, y al parecer, sobre las doce y pico, cuando ya se encontraba encima de la playa de Santa Pola, su motor sufrió un fallo técnico.
Como la playa se encontraba llena de bañistas a esa hora, el empresario murciano trató de amerizar mar adentro, pero terminó estrellándose contra el agua a unos 200 metros de la orilla. El ocupante del segundo ultraligero ha sido testigo de todo y así lo ha relatado posteriormente a la Guardia Civil.
Una persona especial.
ResponderEliminarHoy el tanatorio estaba lleno de su familia de La Colegiala, sus trabajadores. También gente de la calle, vecinos, amigos, y por supuesto su inmensa familia.
Su hija María Baños ha leído una carta que le ha escrito. Conmovedora. No había un alma en la Iglesia que no se haya conmovido. Un sentimiento sincero, de unión, de familiaridad, ... pero también de tristeza y consternación.
Desde aquí, les mando a todos un abrazo muy fuerte.
NAM.