MURCIA.- Ecologistas en Acción advierte que la reciente publicación de la orden ministerial que establece 7 Zonas de Especial Conservación en el litoral español [1], que incluye la franja litoral de Águilas a Cabo de Palos, destaca como grave amenaza para el litoral sumergido protegido de la zona de Cartagena, el proyecto de instalación de un macropuerto de contenedores en El Gorguel.
La orden del Ministerio de Agricultura, Alimentación y Medio Ambiente contempla el paso a Zona de Especial Conservación (ZEC) del espacio marítimo de los Valles Submarinos del Escarpe de Mazarrón; de los cuales forma parte la zona sumergida de la costa de Cartagena. Esta figura de conservación, que forma parte de la Red Natura 2000, incluye los respectivos planes de gestión de estos espacios y una amplia lista de restricciones para los diversos tipos de actividades que se contemplan en dichas zonas (náuticas, industriales, urbanísticas,etc).
Para la organización ecologista es significativo que el Ministerio reconozca que en esta Región Mediterránea existen "extraordinarias características fisiográficas y oceanográficas", lo que la convierte "en una zona de gran riqueza en cuanto a flora y fauna marina y en especial, en un lugar de elevada importancia para numerosas especies marinas pelágicas de interés, entre las que se encuentra la tortuga boba (Caretta caretta) y numerosas especies de cetáceos".
Ecologistas en Acción considera importante que esta orden reconozca y destaque que en la zona del Gorguel existen dos tipos de hábitats comunitarios: Arrecifes y Fondos de Máerl, y que reconozca abiertamente que "la propuesta de creación del puerto de contenedores de El Gorguel plantea la construcción de parte del dique de abrigo sobre este tipo de hábitat, lo que provocaría su ocupación física de carácter permanente e irreversible".
Así mismo, destaca otras afecciones importantes sobre hábitats y especies marinas como: Pérdida o degradación del hábitat, alteración comportamiento de especies, alteración de la dinámica litoral, entre otras.
El colectivo ecologista recuerda que ya advirtió en su día que los graves impactos ambientales, sociales y económicos que este innecesario puerto causaría a la sociedad murciana, lo hacen inviable.
Y tampoco olvidan las declaraciones que ya hizo el entonces presidente de Puertos del Estado, en las aseguraba que "no es momento de hacer más infraestructuras sino de pagar las que ya existen y optimizar el uso de las mismas".
Por todo ello, Ecologistas en Acción considera que la Declaración de Impacto Ambiental (DIA) de este proyecto no puede ser más que una DIA negativa, ya que nada justifica la necesidad de su realización y puesta en marcha, ni en El Gorguel ni en ningún otro sitio, pero sobre todo debido a los importantes e irreversibles impactos ambientales que generaría este megalómano y descabellado proyecto.
[1] - Orden AAA/1366/2016, de 4 de agosto, por la que se declaran zonas especiales de conservación de lugares de importancia comunitaria de la Región Marina Mediterránea de la Red Natura 2000, se aprueban sus correspondientes medidas de conservación y se propone la ampliación de los límites geográficos de dos lugares de importancia comunitaria. BOE nº 193, de 11 de agosto de 2016
Medio Ambiente lleva a cabo una estrategia
para conservar anfibios en Sierra Espuña
La Consejería de Agua, Agricultura y Medio Ambiente desarrolla una estrategia para conservar anfibios en el parque regional de Sierra Espuña, en colaboración con diversas entidades como la Asociación Meles y la Asociación Herpetológica Murciana (Ahemur), así como con la Universidad de Murcia. El objetivo es conseguir la supervivencia de este grupo tan amenazado y garantizar unas buenas condiciones en sus hábitats a largo plazo.
Las líneas de trabajo acordadas son la realización de un inventario y
seguimiento a largo plazo de cuerpos de agua y anfibios; actuaciones de
mantenimiento, mejora y creación de cuerpos de agua; disponer de
protocolos de actuación ante emergencias (enfermedades, especies
exóticas) y el desarrollo de acciones de sensibilización y divulgación
sobre la importancia y necesidad de conservación de los anfibios.
En Sierra Espuña habitan especies de anfibios de gran importancia
como el sapo partero bético (Alytes dickhilleni) y el gallipato
(Pleurodeles walt). La existencia de cuerpos de agua permanentes resulta
imprescindible para la supervivencia de las diversas especies de
anfibios. Por tal motivo, la primera actuación que se ha llevado a cabo,
tras firmar el acuerdo el pasado mes de mayo, ha sido la elaboración de
un inventario de los cuerpos de agua. Se ha constatando su ubicación,
estado de conservación, datos de biodiversidad, así como de los
parámetros físico-químicos básicos del agua, en una base de datos, lo
que permitirá realizar un seguimiento a largo plazo, así como llevar a
cabo acciones de mejora.
Este inventario se ha realizado a través del acuerdo de prácticas
externas de Grado en Ciencias Ambientales coordinadas con la Facultad de
Biología de la Universidad de Murcia. En total se han registrado 29
cuerpos de agua: 22 balsas, 3 charcas y 4 abrevaderos. La gran mayoría
cuentan con agua de forma permanente, por lo que constituyen un hábitat
idóneo para los citados anfibios. También se benefician de estos cuerpos
de agua otros grupos de animales: mamíferos como el jabalí y la garduña
y aves como el mirlo capiblanco, el zorzal o el herrerillo capuchino.
La Consejería ha emprendido actuaciones de carácter urgente para
conservar y mejorar estas infraestructuras, con medidas tales como la
reparación de balsas con fugas de agua y la construcción de rampas para
facilitar el acceso y salida de los anfibios. Desde el año pasado, en
colaboración con asociaciones de voluntariado, se ha actuado en 7
lugares vitales para los anfibios (cinco balsas y dos canalizaciones), y
está previsto actuar en otras 4 en lo que resta de 2016.
Según la asociación Ahemur, la presencia del gallipato en Espuña
refuerza la importancia de este espacio natural como refugio de una
importante biodiversidad y una de las zonas con mayor variedad de
anfibios del sureste ibérico. Los anfibios son un elemento
imprescindible en los sistemas naturales, donde actúan como
controladores de las poblaciones de invertebrados, y son un excelente
bioindicador de la salud de los ecosistemas.
Junto al gallipato, se reproducen otras 6 especies en su entorno,
concretamente: el sapo común (Bufo spinosus), sapo corredor (Bufo
calamita), sapillo moteado (Pelodytes punctatus), sapo de espuelas
(Pelobates cultripes), rana común (Pelophylax perezi), y el sapo partero
bético (Alytes dickhilleni), especie endémica del sureste ibérico. A
estas especies se podría sumar la salamandra (Salamandra salamandra),
que también fue citada hasta los años 90, y tal vez siga presente en la
zona.