MURCIA.- La Plataforma en Defensa del Patrimonio Cultural de Murcia, recientemente constituida por diversos colectivos y asociaciones murcianas entre las que se encuentra Huermur, presentó una denuncia ante la Dirección General de Bienes Culturales de la Consejería de Cultura de la Comunidad Autónoma de la Región de Murcia por la colocación en la fachada norte de los Molinos del Río de un rótulo de grandes dimensiones, de estridente colorido y de carácter permanente anunciando “Turismo Murcia”, ya que este incumplía el artículo 9 del Texto Refundido de las Ordenanzas Reguladoras del Plan del Conjunto Histórico-Artístico de Murcia.
El Edificio de los Molinos del Río, es una
construcción catalogada con grado de protección dos e incluida dentro de dicho
Conjunto Histórico-Artístico declarado Bien de Interés Cultural (B.I.C.).
Por este motivo Huermur solicitó su retirada
inmediata y el restablecimiento de la legalidad infringida.
En contestación a la denuncia presentada, la Consejería
de Cultura y Turismo remitió, en julio de 2013, un escrito al Ayuntamiento especificando que “la instalación no se ajusta a lo previsto en el Texto Refundido de
las Ordenanzas Reguladoras del Plan del Conjunto Histórico de Murcia, en cuanto
a publicidad exterior, según lo dispuesto en el artículo 9”.
Transcurrido medio año sin que los
responsables municipales hayan acatado la Ley y retirado el mencionado rótulo
de la fachada de Los Molinos del Rio, la Plataforma en Defensa del Patrimonio
Cultural ha presentado la oportuna denuncia en fiscalía por presuntos daños al
patrimonio histórico y por un presunto delito de desobediencia del artículo 410
del Código Penal contra el alcalde de Murcia y su concejal de Turismo.
"No resulta comprensible que se gaste dinero
público en un rótulo que degrada el entorno monumental de la zona (Puente
Viejo, Martillo del Palacio Episcopal, Ayuntamiento, Instituto Cascales), que
no cumple la Ley de Patrimonio Histórico y que por lo tanto ha sido adquirido y
colocado sin consultar a los Servicios Jurídicos correspondientes, y que una
vez requeridos para que sea retirado estos responsables municipales se nieguen
al cumplimiento de la Ley", señala en un comunicado.
"Con comportamientos de este tipo por parte del
concejal y el alcalde de Murcia no resulta posible que estos mismos nos exijan
a los ciudadanos el cumplimiento de las leyes, cuando debe ser la Administración
la que muestre un comportamiento ejemplar en la custodia de aquellos bienes del
patrimonio cultural que gestiona o de los que es propietaria", se añade.
"En este mismo sentido, en las últimas semanas
se ha visto como a pesar de obligar a los propietarios de inmuebles en obras en
el Conjunto Histórico a colocar lonas con imágenes de las fachadas, el
Ayuntamiento no hacía lo mismo con los andamios instalados en la fachada
principal de la Casa Consistorial, hasta hace unos días.
Cabe añadir respecto a las declaraciones
atribuidas al concejal Cascales Tarazona en un medio, donde alega para
justificar el mantenimiento del cartel ilegal que el mismo está instalado “en
un edificio de propiedad municipal”, que la propiedad no otorga la posibilidad
de disponer de cualquier forma de dicho bien integrante del patrimonio
cultural. Recordamos que es la misma justificación que en el caso del Molino de
Oliver alegaban los responsables de su derribo y que no les ha eximido de
acabar en el banquillo de los acusados.
Por todo ello, desde la Plataforma en Defensa
del Patrimonio Cultural de Murcia creemos que el único camino posible para los
responsables municipales es el cumplimiento estricto de la legalidad y de sus
propias normativas de protección del patrimonio cultural, el acatamiento a la
orden de la Consejería de Cultura y la retirada de un cartel publicitario sin
ninguna utilidad para los murcianos, ya que en el mismo edificio no se
encuentra ninguna Oficina de Turismo abierta al público, sino el despacho del
propio concejal y sus colaboradores", concluye.